Mourinho: «Me voy tranquilo»

Pocas preguntas, respuestas muy largas y discurso fácil, repleto de tópicos, sin referirse a cuestiones claves como el mal juego del equipo y la distancia de siete puntos que se abre con el Barça. José Mourinho destacó a Osasuna, evitó la autocrítica y ni siquiera tuvo que contestar a la cuestión clave de si daba la Liga por perdida.

Si ante el Barça dijo que era una derrota "fácil de digerir", esta vez aceptó la pérdida de tres puntos con resignación.

"Luchamos hasta el final y me voy tranquilo. No puedo reprochar nada a los jugadores. Lo han dado todo. Mañana será otro día", comentó. "Prefiero perder así, cuando el adversario hizo mucho por ganar el partido, que regalarlo. Osasuna se dejó todo lo que se tenía que dejar. Luchó hasta el límite", comentó Mourinho.

El técnico portugués reconoció que en el Reyno de Navarra se dan "condiciones difíciles para jugar", pero alabó a la afición rojilla. "El público estuvo fantástico, apoyó a su equipo y participó en la victoria". Tampoco puso peros a la afición del colegiado asturiano Muñiz Fernández.

Aunque Mourinho comentó hace días entre sus allegados que la Liga estaría acabada si el Barça se escapaba a seis puntos, no ya a siete, Jorge Valdano , el director general, no ve el campeonato sentenciado porque, entre otras cosas, el Madrid no es un club que "se rinda fácilmente".

"Uno nunca espera perder. Fue un partido muy complicado desde el primer minuto, un resultado muy malo para nuestros interesantes.

Duro, pero no definitivo", aseguró a Canal Plus. "No se puede dar por acabada nunca la Liga. Somos un club al que le caracteriza la resistencia a este tipo de frustraciones. Vamos a luchar hasta el último aliento, que es un signo de este club al que no vamos a renunciar", añadió.

Recordó Valdano la pasada temporada el Madrid se sobrepuso a una situación similar y peleó el título con el Barcelona. "Hemos tenido eliminatorias de Copa del Rey en medio exigentes, que desgastan. Son resultados inesperados a los que hay que sobreponerse. Queda mucho campeonato por delante, esto es fútbol y aún aspiramos a todo", insistió.

Quizá más rotundo entre los expedicionarios blancos fue Arbeloa, quien asumió que el objetivo se ha puesto muy difícil en el torneo de la regularidad. "En otros campeonatos esta distancia es remontable, pero en nuestro campeonato será muy complicado", reconoció el polivalente jugador blanco.