Cataluña prohíbe los toros pero autoriza la caza con arco y flecha de jabalíes

En Cataluña se prohíben los toros pero en cambio se autoriza la caza de jabalíes con arco y flecha. Esta es la denuncia que ha hecho la Asociación en Defensa de los Derechos del Animal (Adda), que tras conocer los planes de la Generalitat de autorizar batidas de jabalíes en el parque de Collserola mediante este peculiar método, denunció la contradicción que supone prohibir la lidia alegando el sufrimiento del toro, y en cambio permitir una forma de caza que provoca una muerte «larga y cruel» al jabalí.

La iniciativa del Govern, de la que ayer daba cuenta «El Punt», surge a raíz del problema de superpoblación de jabalíes que se ha detectado en el parque de Collserola, y la incursión, cada vez más frecuente, de ejemplares en zonas urbanas. Sin ir más lejos, sólo entre enero y septiembre de 2010 se registraron 540 detecciones de jabalíes en el término municipal de Barcelona, y según la Generalitat la cifra de ejemplares que podrían ahora mismo vivir en el parque sería de unos 889.

Ante la constatación de que el «único medio de control potente de la población de jabalíes es la captura», según el Govern, la dirección general del Medio Natual aprobó el pasado mes de octubre un Plan Técnico de Gestión Cinegética de las zonas de caza controlada en Collserola, donde se establecen las condiciones para las batidas (de día). Como novedad, dicho plan incluía la posibilidad de realizar caza al acecho, de noche, un método que se considera más discreto y selectivo que las batidas. El número total de ejemplares capturados en 2009 fue de 252; 185 en 2008 y 177 en 2007.

Ahora, yendo más allá, y como forma complementaria de captura, la Generalitat propone recurrir a la caza deportiva con arco y flechas, para lo que se autorizará a grupos de arqueros especializados que, de noche y al acecho, tratarían de reducir él número de ejemplares. Se trata de una técnica, precisa el Govern, ya probado con anterioridad en diferentes puntos de Cataluña.

En ningún caso, se precisó desde el Ayuntamiento de Barcelona, la captura de ejemplares se producirá dentro de su término municipal, donde no está autorizada el uso de armas de fuego ni tampoco la cacería.