Bono envía a comisaría a Willy Toledo y otros cinco prosaharauis
El Congreso aprueba una moción que condena los incidentes en El Aaiún y exige libertad de prensa
Las votaciones del Pleno del Congreso se interrumpieron ayer de golpe con unos gritos procedentes de la tribuna de invitados: «¡El Sahara no se vende! ¡Libertad! ¡Sahara libre! ¡Hipócritas!» Unos minutos antes se había debatido una moción de condena de los «incidentes violentos en Agdam Izik y en El Aaiún», que se aprobaría después casi por unanimidad (hubo una abstención). Las proclamas prosaharauis salieron de media docena de activistas, entre ellos el actor Willy Toledo, que puestos en pie se despacharon a gusto contra los diputados y la posición del Gobierno de Zapatero ante el Sahara. Dos de ellos, Toledo y otro más, acudieron invitados por IU, mientras que el resto se presentó por su cuenta.
El presidente del Congreso, José Bono, paró en seco el incidente y con gesto áspero instó a los servicios de la Cámara a desalojar inmediatamente a los alborotadores y a ponerlos a disposición de la Policía Nacional: «Les ruego expulsen de la sala a quienes gritan y tomen sus nombres por si estuviesen cometiendo alguna falta o delito». Los activistas salieron de la tribuna sin dejar de gritar y gesticular, lo que acabó de enfadar a Bono, quien fue más tajante: «¡Entréguenlos a la comisaría del Congreso!».
De la tribuna fueron llevados a otra sala, donde permanecieron unos 40 minutos, hasta que por fin les trasladaron hasta la comisaría del Congreso, para tomarles sus datos. Allí recibieron la visita de la diputada de ICV, Nuria Buenaventura. De ahí pasaron a un furgón policial, con dirección a la comisaría de Moratalaz. Poco antes de las siete de la tarde quedaron en libertad con cargos, tras negarse a declarar, acusados de un delito de alteración grave del orden público por el que se exponen a una multa económica, según informa Ep .
Con la moción, pactada entre todos los grupos, el Congreso condena los incidentes ocurridos en Agdam Izik y El Aaiún, expresa a Marruecos su preocupación ante las informaciones sobre violaciones de derechos humanos y solicita a ese país que respete el libre acceso de la prensa.
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