Primero fue en el debate sobre el estado de la nación y ahora como posible moneda de cambio para apoyar los Presupuestos. Y es que el PNV podría volver a la carga con sus pretensiones de celebrar un referéndum en el Valle de Villaverde para que los vecinos de este municipio, ubicado en Vizcaya pero que pertenece a Cantabria, decidan si quieren seguir siendo cántabros o si prefieren solicitar su anexión al País Vasco.
La idea, que se extiende también a Treviño, enclave burgalés en Álava, será una «exigencia» de los nacionalistas vascos al presidente del Gobierno para sacar adelante las cuentas públicas del próximo año, según ha alertado el PP cántabro. «Y es sobradamente conocida la predisposición de Zapatero a hacer concesiones a los nacionalistas», ha recordado el líder de los populares, Ignacio Diego, que está convencido sin embargo de que el «disparate» que pretende el PNV no prosperará.
Tampoco cree que llegue la sangre la río el presidente cántabro, para quien la propuesta del partido de Iñigo Urkullu es una «tontería», una «patochada» por la que no merece la pena ni «cabrearse». A juicio de Miguel Ángel Revilla (PRC), este planteamiento es «para entretener al personal, porque el PNV vive siempre de estas cosas, de crear conflictos territoriales, nacionalismos, separatismos, cosas de éstas... Amenazando para intentar ordeñar la vaca en Madrid».
Tras comparar esa propuesta de referéndum con las consultas ilegales que se ha celebrado en varios ayuntamientos catalanes, Revilla ha recordado que para que Valle de Villaverde pasase a Vizcaya antes habría que hacer una reforma del Estatuto de Autonomía de Cantabria que lo permitiera. «Para conseguir un referéndum, nada menos que tendría que aprobarlo, primero, Cantabria y, después, el Parlamento nacional. ¡Eso es imposible! Que se quiten de la cabeza esa idea», aconseja a los nacionalistas vascos, a quienes también recomienda que «se aprendan la ley».
El PNV ya pidió la celebración de referendos en el Valle del Villaverde y en el Condado de Treviño para decidir su incorporación a Euskadi, propuesta rechazada por PSOE y PP. Ahora podría retomar la demanda en la negociación de los Presupuestos.