Mota y Viyuela, juntos por primera vez "El humor es supervivencia"

Estos dos grandes de la comedia española se juntan por primera vez en el cine para protagonizar García y García. Nadie mejor que ellos para reflexionar sobre las claves del humor. Una charla llena de recuerdos que nos lleva hasta el lugar donde nacen todos sus gags: la infancia, cuando “las calles del pueblo eran nuestro parque de atracciones y el mundo se paraba si Gila salía en televisión".

Sábado, 07 de Agosto 2021

Tiempo de lectura: 11 min

Pero, ¿cómo no se le había ocurrido a nadie unir en la gran pantalla a José Mota y Pepe Viyuela?», se preguntó la directora de cine Ana Murugarren. Y dicho y hecho. Cuando le propusieron hacerse cargo de García y García, la comedia que se estrena en los cines el próximo 27 de agosto, quiso poner su granito de locura. «Propuse unir por primera vez a Mota y Viyuela para encarnar a los personajes, como si fueran unos Steve Martin y Richard Pryor patrios», bromea. Convencerlos para que formaran pareja cómica no fue lo más difícil. Lo de una pandemia mundial en mitad del rodaje ya fue harina de otro costal. Pero el show siempre sabe cómo continuar y, tras un año de rodaje entre medidas de seguridad, sus protagonistas se sientan a reflexionar sobre cómo han llegado hasta aquí. El estado actual del humor, la vigilancia que han impuesto las redes sociales al más puro estilo George Orwell, la tragedia que encierra la comedia y, sobre todo, el origen de su talento: sus recuerdos de la infancia.


XLSemanal. Había muchas ganas de comedia después de lo que llevamos encima...

José Mota. Porque el ser humano es como una olla exprés y necesita el humor como válvula de escape para dejar salir todos los humos. La comedia nos hace libres. No hay que tenerle miedo al humor, aunque corran tiempos difíciles y últimamente transite por pasillos cada vez más estrechos por lo que se considera políticamente correcto.

Pepe Viyuela. Y ese era el objetivo de esta película: que la gente se riera y descansara de sus tensiones, aunque fuera solo durante un rato. Hay muchas ganas de que los cines se vuelvan a llenar.

"El ser humano es como una olla exprés y necesita la comedia como válvula de escape para dejar salir los humos"

José Mota

Mota. Cada vez tenemos pantallas más grandes en casa, pero el milagro es compartir la risa con otros. Esa comunión que se produce en las salas es única. Durante la pandemia he tomado conciencia de cuánto nos necesitamos unos a otros. Porque tú solo eres una tristeza. Si algo hemos aprendido es a empatizar con el de enfrente, a preocuparnos por los otros.

alternative text
Una comedia de altos vuelos.Mota y Viyuela dan vida a los protagonistas de García y García, una comedia de enredos, con persecuciones en el aeropuerto incluidas.Fotografía: Daniel Méndez

XL. Algo que se lleva haciendo en los pueblos de toda la vida…

Viyuela. Ha tenido que venir una pandemia para que en las ciudades nos demos cuenta de eso [se ríe]. Lo bueno es que, si vives la cercanía que hay en los pueblos y tienes algo de sensibilidad, eso siempre se queda y se puede adaptar.

Mota. Por eso, yo me siento tan afortunado, porque he nacido en un pueblo y, cuando era pequeño, las calles eran nuestras. Luego, en los años setenta llegaron los coches y nos las arrebataron, pero yo todavía me recuerdo como un gamo saltando por encima de ellos.

XL. No quiero ni imaginar a un hijo haciendo eso.

Mota. Vale [se ríe], pero reconozcamos que ahora hay mayor acceso a la información… o a la desinformación, según se mire, pero se está perdiendo la pureza de las cosas pequeñas, aquellos juegos en la calle… A medida que entran cosas, se van perdiendo otras.

XL. Lo de las gallinas que entran por las que salen...

Mota. Totalmente. Yo no puedo evitar ser analógico y tener pierna y media en el 1.0. Cuando leo un libro, necesito tocarlo porque hay una comunión física en ello incomparable. Eso no existe con lo digital. Ya sé que tendemos a mitificar el pasado, pero hemos sido muy afortunados por el momento en el que nos ha tocado nacer. Recuerdo perfectamente cómo se paraba el mundo cuando salían en la tele gente como Gila, Tony Leblanc, Esteso y Pajares…

Viyuela. Estoy de acuerdo, creo que la infancia es un paraíso perdido, pero también para otras generaciones. Mi madre, habiendo vivido la guerra, recuerda su infancia con un cariño que no es comparable al resto de su vida; y la gente de esta nueva generación también tiene la suficiente energía y proyección de futuro como para emocionarse. Mira, por ejemplo, Alexity, la niña que interpreta a mi hija en la película, que cuando entraba lo llenaba todo de electricidad.

alternative text
La 'youtuber' Alexity debuta como actriz. Con más de 4 millones de seguidores, la estrella de YouTube y Tik Tok interpreta a la hija de Pepe Viyuela en la película.

XL. ¿Cómo ha sido ese choque generacional de trabajar con una estrella de YouTube y Tik Tok?

Viyuela. Maravilloso. Es una niña elegante y muy despierta. Todo el rato haciéndose fotos y queriendo hacérselas conmigo. Yo, que ni utilizo la cámara del móvil [se ríe]. Estaba siempre jugando, pero desde un lugar distinto al nuestro porque sabe que todo va a verse, así que estudia perfectamente sus poses.

Mota. ¿Ves? Yo no podría estar contando mi vida en tiempo real a cada rato, me agobiaría muchísimo. Pero hay que reconocer que si le das un buen uso a las redes tienen su lado positivo. Yo tengo un Tik Tok donde subo sketches con el material televisivo que he ido haciendo y tengo una barbaridad de seguidores [se ríe].

XL. ¿Y no ha pensado en poner a alguno de sus personajes clásicos a hacer coreografías en Tik Tok?

Mota. Sería maravilloso hacer un Tik Tok con la Vieja del Visillo [se ríe]. Mezclar algo tan actual con el paisanaje al que ella pertenece… Aunque, en el fondo, todos esos personajes encierran mucha tragedia. Mujeres de pueblo que se alimentan más de la vida de los demás que de la suya propia. Mirad también a la Blasa y su frase famosa de «Ay, señor, llévame pronto». ¡Hostia, que si miras lo que hay detrás es tremendo! Las miserias, las ruindades. Que su marido ya no está y su vida se ha terminado. Está claro que no hay comedia sin tragedia y los fondos del humor siempre son los mismos, lo que cambia es la manera en la que tú lo comunicas.

"Durante la pandemia han surgido muchos cómicos que le han sacado punta a la situación. El humor es supervivencia"

Pepe Viyuela

XL. Que nos lo digan con el confinamiento, que al segundo día ya se hacían chistes del virus.

Mota. Porque cuando tú conviertes en comedia una tragedia estás volando por encima, a nivel de salud mental; sabes que eso no va a poder contigo. Además, es que nos encanta reírnos de las tragedias. Siempre me he preguntado por qué nos descojonamos cuando alguien se cae. Vas por la calle, uno se mete una hostia y el tiempo de espera en reírte es cero. Y si te pasa a ti lo primero que haces es levantarte a ver quién está mirando. Ojo, que a lo mejor tienes la rodilla palpitando, pero en ese momento ni lo notas. Si hay alguien mirando, no duele. Se va y llega el dolor.

Viyuela. Esto también tiene mucho que ver con el humor que hacía Gila y esa generación brillante de humoristas españoles que nacen y se desarrollan durante la dictadura y que vivieron una situación muy complicada de falta de libertad. Adquieren renombre precisamente porque se alzan ante la adversidad. El humor se hace muchísimo más necesario. Durante la pandemia han surgido muchos cómicos que se reían de esos momentos en casa con la bata puesta o sin afeitar, de lo gordos que nos íbamos a poner… Supieron sacarle punta a esas situaciones y eso viene de la necesidad de superar el trauma que estábamos viviendo. El humor es muchas cosas, pero, sobre todo, es necesidad de supervivencia.

José Mota formó pareja cómica con Juan Muñoz en Cruz y Raya (1987-2007). Personajes clásicos como la Blasa o la Vieja del Visillo y su famosa frase de «no cuentes na... que ya lo cuento yo» tienen su origen en Montiel (Ciudad Real), su pueblo natal.

XL. Pero, por otro lado, también aumentaron figuras muy actuales como los 'ofendiditos' o los haters.

Viyuela. Porque a veces el humor se concibe más como una agresión que como un agente de resolución de conflictos, y cada vez hay más clima de intolerancia. Son tiempos de pies de plomo para todo. Estamos en una fase de hipersensibilidad porque no tenemos capacidad de autocrítica y falta de cultura humorística. Y yo me incluyo porque muchas veces no estoy a la altura de lo que predico.

Mota. Cuando debería ser al revés: una sociedad que abraza el humor es siempre una sociedad más sana.

Viyuela. Vivimos en un país donde se pueden hacer ya chistes de todo, pero las redes sociales han enturbiado un poco el enfrentamiento y la polarización. Han abierto la posibilidad de la agresión en la distancia y han surgido una serie de individuos agazapados en la oscuridad del anonimato a los que es muy difícil responder porque no sabes con quién estás hablando.

"Las redes sociales nos han hecho menos libres porque nos han llevado a la autocensura. Nos la estamos cogiendo con papel de fumar por miedo a lo que pueda pasar"

Pepe Viyuela

XL. ¿Nos han hecho las redes menos libres de lo que creíamos?

Mota. Volvemos a lo de las gallinas. Hemos ganado en comunicación, pero cada vez compartimos menos cosas en la vida real. Estoy cansado de ver en los restaurantes a una misma familia sentada en una mesa, cada uno con su móvil, su burbuja, totalmente incomunicados.

Viyuela. Quizá las redes nos han hecho menos libres porque nos han llevado a la autocensura. Por una parte, no está mal porque nunca hay que perder de vista el respeto, pero, por otra, nos la estamos cogiendo con papel de fumar porque hay mucho miedo a lo que pueda pasar.

Mota. Nos hemos convertido en nuestros propios vigilantes y también en el vigilante del que está al lado. Cuando George Orwell hablaba en su novela 1984 de telepantallas y de ese 'gran hermano' que controlaba a todos, lo que yo no podía imaginar es que eso iba a ocurrir ahora. Todo está constantemente sometido a juicio.

«El payaso es levantarse después de cada fracaso», dice Viyuela (Logroño, 1963). Además de actor, es licenciado en Filosofía y Bellas Artes y ha escrito libros como Bestiario del circo. Su primera aparición televisiva fue en Un, dos, tres… con el número de la silla. También ha sido Filemón en las dos entregas cinematográficas de Mortadelo y Filemón.

XL. Con la alegría que da hacer el payaso…

Viyuela. Yo reivindico siempre esa figura porque significa la capacidad del ser humano para reconstruirse. Estamos especialmente habilitados para equivocarnos, pero con esos errores es como aprendemos. Y eso es el payaso: levantarse después de cada fracaso.

Mota. Totalmente de acuerdo. Simboliza la pureza del niño que todos llevamos dentro, ese niño que a veces se ofusca porque el adulto no le deja divertirse.

XL. ¿Y cómo eran ustedes de pequeños?

Mota. Más de un reglazo me llevé en la mano por soltar alguna chorrada. «José, ¿para qué sirven los huesos?». «Para echarlos al cocido». «¿Ah, sí?, ¡pon las manos!». Pero siempre se imponían las cosquillas del chiste sobre los picores del reglazo. Es muy curioso, pero ya de niño sentía una atracción irresistible hacia la comedia. Cada vez que veía aparecer en televisión a un cómico, era como si el mundo se parase, era literalmente magia.

Viyuela. Yo era más bien tímido. Tenía muchos amigos, pero no era precisamente el gracioso del grupo.

Pepe Viyuela (Logroño, 1963).
Pepe Viyuela (Logroño, 1963). «Un Domingo de Ramos, más perdido que un alce en un Mercadona», asegura el actor.

XL. Capaz será de decirme también que sus números más clásicos de torpeza no están basados en hechos reales.

Viyuela. Pues, hombre, algo torpe sí que soy [se ríe]. Pero esos números de la silla o la escalera siguen funcionando porque nadie está exento de torpeza. Todos nos enfrentamos con situaciones de ese estilo cada día.

XL. ¿Y qué hay de sus personajes, José? ¿Cuánto de real tienen?

Mota. Todos pertenecen al imaginario colectivo o han formado parte del paisanaje de mi niñez. No son nadie en concreto y a la vez somos un poco todos. Hablando un día con un amigo americano sobre la particularidad del humor, me decía que era muy de aquí la Vieja del Visillo, y yo le dije: «No te engañes, en Wall Street también las hay, solo cambia el visillo por el estor. Pero la persona es la misma. La curiosidad humana no conoce fronteras».

José Mota (Montiel, Ciudad Real, 1965).
José Mota (Montiel, Ciudad Real, 1965)."Estaba en tercero de EGB cuando pidieron voluntarios para una obra de teatro. Levanté la mano el primero y al cabo de unos meses estábamos estrenando en el pueblo una obra de Muñoz Seca llamada El maestro Canillas. Allí sentí por primera vez la picadura irresistible de esta maravillosa profesión", cuenta el actor.

XL. ¿Recuerdan la primera vez que descubrieron que sus palabras provocaban la risa colectiva?

Mota. Tuvo que ser de muy niño, pero lo que sí recuerdo perfectamente es que, cuando esto ocurría, todo cobraba sentido. De repente, las cosas se recolocaban en el sitio adecuado y era maravillosa aquella agradable sensación de estar escondido en un burladero que me permitía nadar y guardar la ropa.

Viyuela. Yo lo sitúo más en la adolescencia, cuando íbamos a colonias en verano y montábamos historietas con el fuego del campamento. Pero nunca me creí gracioso ni pensé que algún día fuera a convertirme en cómico o payaso.

XL. Menudo ojo para augurar el futuro…

Viyuela. Es que yo he pasado siempre muy inadvertido [se ríe]. Ahora, también te digo, vengo de una familia donde la risa siempre estaba presente. Recuerdo las reuniones familiares donde se contaban anécdotas, siempre buscando esa risa, y participábamos todos, grandes y pequeños, hombres y mujeres.

XL. Presencia femenina. Está bien que lo diga, porque hay quien todavía mantiene que el nivel de las mujeres cómicas es más bajo…

Viyuela. Eso no es más que la extensión del machismo crónico que hay en nuestra sociedad, y el mundo del humor no está exento. No es falta de talento, es un tema social y cultural que hace que las mujeres lo hayan tenido siempre más difícil e incluso hayan tenido que reprimirse porque, de lo contrario, recibían palabras muy gruesas.

Mota. Pero mira el talento de las grandes cómicas que hemos tenido en España: Lina Morgan, Florinda Chico, Rafaela Aparicio, Gracita Morales, Mary Santpere… Por no hablar de las actuales, por supuesto. Mujeres que han hecho historia del humor.

Artículo solo para suscriptores
Etiquetas: actores españoles
MÁS DE XLSEMANAL