
Las diez iglesias más desconocidas de Toledo
No están en el punto de mira de todos los «flashes» pero solo una visita por ellas, basta para enamorarse. «Grecos» y otras joyas están custodiados por sus centenarios muros
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12345678910Iglesia de Santa Eulalia

Fachada de la iglesia de Santa Eulalia - ana pérez herrera La iglesia de Santa Eulalia, situada en la ciudad de Toledo, fue una de las antiguas parroquias de los mozárabes, y conserva restos de pinturas de época romana y elementos mozárabes. Aunque la iglesia tiene una parte exterior desfigurada por las continuas reconstrucciones, de su interior mozárabe conserva la planta basilical de tres naves, los primitivos arcos de herradura encuadrados por alfiz, apoyados sobre pares de columnas, y los capiteles visigodos.
Durante su restauración aparecieron pinturas de la época romana, época a la que también pertenecen algunas de las columnas que separan las naves.
Iglesia de San Lucas

La iglesia de San Lucas está enclavada en un recinto murado que fue un antiguo cementerio - ana pérez herrera La iglesia de San Lucas es una antigua parroquia mozárabe construida en el siglo VII y enclavada en un recinto murado que fue un antiguo cementerio.
Consta de tres naves formadas por cinco arcos de herradura, uno de medio punto y uno apuntado que apoyan sobre columnas de sección octogonal. La nave central se cubre con una techumbre de par y nudillo y cerca de la cubierta se abren una serie de huecos cerrados con celosías.
Cuenta la leyenda que Rainer María Rilke acudía semanalmente desde el Hotel Castilla a oir misa en esta iglesia mozárabe durante su larga estancia en Toledo en el invierno de 1912. Lo hacía atraído por la leyenda que narra que en este lugar se apareció la Virgen para cantar la Salve con unos ángeles venidos del cielo junto a ella.
Iglesia de San Miguel

La iglesia de San Miguel el Alto es de estilo mudéjar - ana pérez herrera La iglesia de San Miguel el Alto fue edificada en el siglo XII, y su principal atractivo radica en su esbelta torre de estilo mudéjar. Fue levantada en el siglo XII en estilo mudéjar y reformada en el siglo XVII, imponiéndole ya algunos cánones estéticos propios del barroco. Además de uno de los templos utilizados por los mozárabes.
De su fábrica original destaca su esbelta torre mudéjar, que copia el modelo de la torre de la iglesia San Román, y que también se repite en Santo Tomé, San Pedro Mártir y, con pequeñas variaciones, en Santa Leocadia.
Estas torres están inspiradas en los alminares de las mezquitas musulmanas y su modelo tipológico es como sigue: basamento de piedra, cuerpo de mampostería encintada con ladrillos en los ángulos y un cuerpo de remate con dos o tres vanos de perfiles árabes para las campanas. En San Miguel el Alto, los tres últimos cuerpos de ladrillo se decoran con tres arcos ciegos entrelazados, de medio punto, polilobulados y dos de herradura en el cuerpo de campanas.
Convento de Santa Isabel

El Convento de Santa Isabel de los Reyes fue fundada por «Sor María la Pobre» - ana pérez herrera El Convento de Santa Isabel de los Reyes se encuentra junto a las iglesias de San Antolín y de San Andrés, construido en el siglo XV con características mudéjares y portada plateresca.
Fundado en 1477 por doña María Suárez de Toledo, conocida por «Sor María la Pobre», el Convento de Santa Isabel de los Reyes conserva en su interior abundantes muestras del mudéjar civil a pesar de su reconocido estilo renacentista, destacando especialmente su portada plateresca.
Iglesia San Andrés

La iglesia de San Andrés reúne elementos de diferentes épocas - ana pérez herrera La iglesia de San Andrés es un interesante templo que reúne elementos de diferentes épocas y estilos artísticos, como visigodos, mudéjares, góticos...
La iglesia de San Andrés es un edificio de singular belleza en el que se conjugan a la perfeccción elementos de diferentes épocas y estilos, entre los que destaca su portada principal, única en su género en Toledo. Es de estilo almohade, rematada por arquillos sobre columnas vidriadas y restos visigodos. En el interior se conservan también algunos vestigios visigodos y retablos realizados por Juan de Borgoña y su colaborador Antonio de Comontes.
La cripta de esta iglesia alberga en su interior un importante número de momias cuyos rostros revelan un sentimiento de dolor, de angustia. Sea como fuere, la sola presencia de estos restos hace que pisar esta cripta sea como acercarse a un mundo tenebroso.
Iglesia San Justo

Iglesia de San Justo - ana pérez herrera La iglesia de los Santos Justo y Pastor, popularmente conocida como de San Justo fue fundada tras la toma de la ciudad por el rey Alfonso VI de León y Castilla, sufriendo distintas transformaciones entre los siglos XIV y XVIII. Se trata de un templo religioso bajo la advocación de los santos niños Justo y Pastor.
Adosada al ábside de la iglesia, se encuentra la capilla del Corpus Christi que conserva un artesonado de madera policromada, con un friso en el que se alternan representaciones de un jinete cristiano y otro musulmán. También cuenta con un importante conjunto de yeserías realizadas utilizando la técnica tradicional en la que se tallasaba el yeso sobre una preparación de barro húmedo. En 2010 la capilla ha sido objeto de un trabajo de recuperación y conservación casi integral.
Iglesia San Sebastián

La iglesia de San Sebastián es un edificio mudéjar - ana pérez herrera La iglesia de San Sebastián es un edificio mudéjar, de planta basilical, levantado sobre los restos de una antigua mezquita, la de Al-Dabbagin. Según los estudiosos del tema, este templo fue la antigua Mezquita de Al-Dabbagin y su estructura, en base a una planta rectangular de forma basilical, está organizada mediante dos arquerías compuestas por arcos de herradura que descansan sobre dos capiteles romanos y seis visigodos reutilizados.
Del conjunto, es destacable la torre, que se levanta en el lugar del alminar de la antigua mezquita. Desde este lugar se pueden observar los restos de murallas que aparecen en los «rodaderos» así como los de presas y antiguos molinos situados sobre el Tajo.
Iglesia San Cipriano

La iglesia de San Cipriano podría haber sido en sus orígenes una mezquita - ana pérez herrera La iglesia de San Cipriano, llamada también de San Cebrián, fue una de las primitivas fundaciones de Toledo. En 1125 la iglesia se cita como parroquia latina, aunque se piensa que en origen pudo ser mezquita, pues lo sugiere su disposición, precedida por un patio, que después se utilizó como cementerio.
Cuentan las leyendas que bajo el altar mayor se encuentra el cuerpo incorrupto del santo que costeó en 1613 la reforma de la iglesia, quien se encuentra vestido con ornamentos sagrados y con la particularidad de que sus zapatos no tienen suela... para que se pueda contemplar su incorruptibilidad.
Iglesia de la Magdalena

La iglesia de la Magdalena es una de las má antiguas de Toledo - ana pérez herrera La iglesia de la Magdalena es una de las más antiguas de Toledo, fundada por mozárabes durante la dominación musulmana. El templo sufrió una importante reforma en el siglo XVIII, momento en que se diseñaron las trazas que hoy podemos contemplar.
En su interior se veneraba la imagen del Cristo de las Aguas, trasladada desde el convento del Carmen Calzado, incendiado en 1810 por las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia y perdida durante la Guerra Civil. Una leyenda narra que esta imagen fue rescatada del río Tajo por los miembros de la Cofradía de la Vera Cruz.
Esta iglesia lleva más de una década cerrada al culto religioso y era una de las más queridas por los toledanos por su imagen de San Antonio.
Capilla de San José

La capilla de San José alberga en su interior dos Grecos - ana pérez herrera La capilla de San José, situada en la calle Núñez de Arce, muy cerca de la parroquia de San Nicolás y no lejos de la plaza de Zocodover, centro neurálgico del Casco Histórico. En su interior destacan dos Grecos, el «San José con el Niño» y la «Coronación de la Virgen», únicos que restan en el sitio, ya que en 1906, un antepasado del actual titular, el político conservador Joaquín María de Mencos y Ezpeleta, Conde de Guendulain, vendiera a un marchante francés, por 300.000 francos, otros dos soberbios Grecos conservados en la capilla, que hoy se guardan en la National Gallery de Washington: «San Martín partiendo la capa» y «La Virgen y ángeles acompañados de Santa Martina y Santa Inés», Una auténtica desgracia y uno de los muchos latrocinios legales que tuvieron lugar en Toledo «la despojada».
Con motivo del centenario del Greco 2014, esta capilla de propiedad privada se abrirá al público.








