Los diez grandes proyectos que Sevilla anunció y nunca hizo
Si las promesas se hubieran cumplido, la fisonomía de la ciudad ahora sería otra: un barrio de arquitectos galácticos en la Cruzcampo, piscinas en el río, un Moneo en el Prado, un nuevo pabellón... Los sueños nos han costado más de cien millones
Actualizado:Si las promesas se hubieran cumplido, la fisonomía de la ciudad ahora sería otra: un barrio de arquitectos galácticos en la Cruzcampo, piscinas en el río, un Moneo en el Prado, un nuevo pabellón... Los sueños nos han costado más de cien millones
12345678910El barrio de arquitectos galácticos en la Cruzcampo
Alfredo Sánchez Monteseirín, en el Ayuntamiento con Vázquez Consuegra, Isozaki, Foster y Nouvel - efe En 2006, Alfredo Sánchez Monteseirín y el grupo Urvasco llegaron a un acuerdo para la venta de los solares de la antigua fábrica de Cruzcampo. Y el alcalde anunció sus planes para este lugar con un «bombazo». Junto a él comparecieron los arquitectos Guillermo Vázquez Consuegra, Jean Nouvel, Norman Foster y Arata Isozaki. Su proyecto de construcción, sobre una parcela de 164.452 metros cuadrados, incluía la construcción de viviendas, un hotel de cinco estrellas, espacios para usos terciarios y comerciales y equipamientos de caracter privado, así como la sede social de Heineken, con el objetivo de dotar al nuevo espacio de interés artístico y arquitectónico.
Los cuatro arquitectos galácticos firmaban el diseño de un nuevo espacio urbano «de alto valor arquitectónico», en el que se ubicarían unas 2.000 viviendas con unas 2. 000 plazas de aparcamientos previstas en unos 60.000 metros cuadrados bajo rasante. Vázquez Consuegra destacó el desarrollo urbanístico de la ciudad que supondría esto. Foster expresó que los arquitectos ya contaban con «algunas ideas interesantes». Isozaki, por su parte, expuso que varios de los arquitectos ya habían trabajado juntos y, pese a definirse como «animales difíciles de controlar», expresó su visión «optimista» de «respetarnos unos a otros». Por último, Nouvel abogó por recrear una «visión poética» de la capital hispalense. Fue el más atinado de todos. Aquella inversión de 700 millones de euros quedó en pura poesía.
Piscinas en el río
Recreación virtual de la piscina en el Alamillo que presentó Zoido - abc El actual alcalde, Juan Ignacio Zoido, vendió durante la campaña electoral de 2007 la construcción de dos piscinas en el río, una en Plaza de Armas y otra en el Alamillo. Cada una de ellas tendría un presupuesto de 3,5 millones de euros y ocuparían un espacio de 3.000 metros cuadrados. Durante su presentación, el entonces candidato del PP aseguró que el proyecto sería una realidad tres meses después de ser alcalde y que, además de realista, era una idea pionera. El pacto entre el PSOE e IU le impidió gobernar y aquel proyecto se olvidó. Pero el propio Zoido le dio de lado en la siguiente campaña. Ahora, sin embargo, ha anunciado la instalación del Paseo del Arte en la calle Torneo, un proyecto de iniciativa privada que incluye de nuevo la idea de la piscina en el río. En su programa, por cierto, el actual alcalde también pregonó la creación del «Foro Ideas Guadalquivir», un «evento anual de octubre para convertir a Sevilla en el centro mundial de las reflexiones sobre las ciudades con río y sostenibilidad». La idea estará en el mismo cajón que la de los arquitectos galácticos.
La red completa de metro
El folleto que buzoneó Monteseirín con la red completa de metro y sus paradas - raúl doblado El anuncio que más claramente se quedó en puro papel fue el de la red completa de metro. Tras inaugurar la única línea que se ha hecho en cuarenta años de palabrería, Monteseirín contrató el diseño de un folleto para repartir por los buzones de la ciudad en los que se explicaba la red completa, con todas sus líneas, como si estuvieran a punto de entrar en funcionamiento. Aquel papel couché se transformó en papelón cuando la nueva consejera de la Junta, Elena Cortés, anunció al llegar al cargo que el sueño se había terminado.
La playa de San Jerónimo
Alejandro Rojas-Marcos anunció una playa en San Jerónimo como ésta de María Trifulca - abc Tratando de recuperar la antigua playa de María Trifulca, situada en la Punta del Verde, donde hoy están los pilares del puente del Centenario y desaparecida en los años sesenta, Alejandro Rojas-Marcos anunció durante la campaña electoral de 1999 un proyecto clave para su programa: una playa artificial en el meandro de San Jerónimo con 60.000 metros cúbicos de arena. El proyecto estaba diseñado por el ingeniero José Luis Manzanares y contemplaba incluso la instalación de generadores de olas artificiales y la implantación en la orilla de sombrillas, duchas y chiringuitos. En aquella idea se iban a invertir cuatro millones de euros. Pero Rojas-Marcos no logró gobernar y Alfredo Sánchez Monteseirín guardó aquella propuesta en el baúl.
El edificio de Moneo en el Prado
Recración infográfica del edificio de Moneo en el Prado, por el que se llegó a pagar al arquitecto - abc El 25 de marzo de 1999 el Pleno del Ayuntamiento, presidido por Soledad Becerril, aprobó la construcción de un edificio del arquitecto Rafael Moneo en el Prado con un coste aproximado a los 5.000 millones de pesetas. A Moneo se le pagaron sus emolumentos y las obras se llegaron a adjudicar a la empresa Dragados. Sin embargo, al llegar Monteseirín al poder lo primero que hizo fue derogar este proyecto y tirarlo a la papelera a pesar del dinero que ya se había invertido en él. Se trataba de un edificio de cinco plantas y 23.000 metros cuadrados en el que destacaba un pórtico de grandes dimensiones con acceso a la cercana estación de autobuses y un aparcamiento subterráneo con capacidad de 590 plazas. El Ayuntamiento pretendía unificar en este edificio singular los servicios municipales dispersos aún en distintas sedes por toda la ciudad.
La biblioteca del Prado
Las obras de la biblioteca de la Universidad en el Prado fueron paradas por los tribunales - gogo lobato Junto al edificio de Moneo, en el Prado de San Sebastián tendría que lucir actualmente la moderna biblioteca de la Universidad que diseñó la angloiraquí Zaha Hadid. Pero el proyecto vulneraba el planeamiento urbanístico y, a la mitad de su construcción, fue tumbado por los vecinos en los tribunales. Casi seis millones de euros después, los jardines han vuelto al estado previo a las obras.
La Ciudad de la Ópera en Palmas Altas
Monteseirín recogió el PGOU de 2002 una Ciudad de la Ópera en Palmas Altas - j.m. serrano El PGOU que planteó el gobierno de Sánchez Monteseirín en 2002 recogía una propuesta de ensueño, la construcción de un Palacio de la Ópera frente a la dársena del Batán, al pie del puente del Centenario. El portavoz de IU entonces, Luis Pizarro, lo apoyó calificando el proyecto de «completo y progresista». El verdadero progreso consistió en el olvido absoluto. Junto a este proyecto se instalaría también el llamado Campus de la Salud en la zona de Palmas Altas vinculando el Hospital Militar, comprado al Ministerio de Defensa, y el Vírgen del Rocío. Próximamente se cumplirán diez años de la adquisición del Militar, cuyas obras jamás se finalizaron y que sigue abandonado a la deriva. Es más, según el convenio firmado entonces, cuando se cumplan diez años de su compra este edificio podrá ser destinado a cualquier otro uso.
El hotel de la Plaza de España
El edificio de Aníbal González se iba a convertir en un hotel de lujo - j.m. serrano Uno de los proyectos estrella de la última etapa de Monteseirín fue ideado por Alfonso Gómez de Celis. Consistía en convertir el edificio de Aníbal González en la Plaza de España en un hotel de lujo. De aquello se habló mucho, pero no pasó de una propuesta más de papel mojado.
Nuevo pabellón para el Mundobásket
Infografía del nuevo pabellón cubierto que se presentó para el Mundobásket 2014 en Los Bermejales - abc Lo anunció Monteseirín y tuvo que descartarlo Zoido. El nuevo recinto de nivel internacional con cines, centro comercial y pabellón polideportivo para albergar los partidos del Mundial de Baloncesto de 2014, del que Sevilla es sede, y que se iba a construir en Los Bermejales o en La Cartuja, se esfumó al «haber fallado la iniciativa privada», según anunció Zoido. A cambio, la solución fue reformar el pabellón de San Pablo, sede del Instituto Municipal de Deportes.
La Feria en el Charco de la Pava
Así iba a quedar la Feria en el Charco de la Pava según el proyecto que presentó el Ayuntamiento - abc Monteseirín propuso cambiar la Feria de Abril de sitio. De Los Remedios al Charco de la Pava. Se llegaron incluso a hacer los planos y hasta se presupuestó la mudanza en 30 millones de euros. Pero la crisis acabó con el debate cuando a finales de 2010 la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir inició las obras para recuperar las márgenes del Parque Dunar. Los pasos peatonales desde la zona de viviendas al parque en sí impidieron que pudiera ubicarse allí el recinto ferial tal y como estaba planteado. Según el dibujo inicial, se iba a construir una pasarela que conectase el real de la Feria con la otra orilla del Guadalquivir, lugar donde, por falta de espacio, tendrían que ubicarse las atracciones de la Calle del Infierno. Todo estaría listo para el año 2011. Tres años después de esa fecha, la Feria sigue en Los Remedios. Y lo que le queda.