Empanada gallega con masa de huevo rellena de carne picada

Para 6 1.8€/pers. 400kcal/100g

Hay algo mágico en las cocinas gallegas durante las fiestas: el murmullo de las conversaciones, el aroma a pan recién horneado y la promesa de un plato que une a todos alrededor de la mesa. La empanada gallega es ese hilo invisible que teje historias y recuerdos. Hoy, sin embargo, no hablaremos de recuerdos, sino de cómo convertir tu cocina en el corazón de una celebración.

Esta receta es un tributo a la tradición, pero con espacio para la creatividad: una masa esponjosa y un relleno que puedes adaptar a lo que tengas en la despensa. ¿Listos para empezar?

La empanada gallega nació como una solución práctica para conservar alimentos en una región donde el clima húmedo exigía ingenio. Los marineros las llevaban en sus viajes, y las amas de casa las preparaban para aprovechar sobras de carnes y pescados. Con el tiempo, se convirtió en un símbolo de hospitalidad: si llegabas a una casa gallega, siempre había una empanada en el horno.

En el siglo XIII, ya aparecía en textos medievales como «empanada de carne«, aunque entonces se elaboraba con masa de pan. Hoy, su versatilidad es tal que en Galicia existe un refrán: «Para cada ocasión, una empanada distinta».

Si te gusta la empanada gallega, prueba la empanada de bonito, típica de las costas cantábricas, o la empanada de zamburiñas, con un relleno que no dejará indiferente a nadie. Y si prefieres algo más ligero, las empanadillas de verduras en freidora de aire son una opción ideal.

Receta de empanada gallega con masa de huevo rellena de carne picada

Preparación paso a paso

Preparamos la masa

1. En un bol pequeño ponemos la levadura en polvo con un poco del agua (unos 50 ml) y dejamos reposar 10 minutos hasta que espume. Para activar mejor la levadura seca podemos poner una cucharadita de azúcar.  Si la levadura es fresca, la desharemos en agua tibia, añadimos una cucharada de harina y dejamos reposar también 10 minutos.
2. Ponemos la harina en un bol, hacemos un hueco y vertemos el resto del agua, la levadura, el aceite, la sal y el huevo. Mezclamos bien hasta obtener una masa pegajosa y pasamos a la mesa, que habremos enharinado. Amasamos 10 minutos hasta que quede suave. Si vemos que está muy pegajosa, podemos añadir un poco de harina en la mesa de trabajo. Formamos una bola, tapamos y dejamos levar 1 hora en un lugar cálido.

Preparamos el relleno

1. Picamos la cebolla y el pimiento.
2. En una sartén, calentamos el aceite y pochamos la cebolla y los pimientos 10 minutos a fuego lento. Añadimos la carne, el laurel, y el pimentón.  Agregamos la sal e incorporamos la passata o los tomates, salpimentamos y cocinamos durante 10 minutos. Dejamos enfriar.

Montamos la empanada

1. Dividimos la masa en dos partes (una un poco más grande para la base). También podemos guardar un trocito pequeño para hacer algún tipo de decoración. Estiramos el trozo más grande sobre hasta formar un rectángulo o un círculo, dependiendo de la forma que queramos.
2. Colocamos el relleno en el centro, dejando unos 3 cm libres en los bordes. Si usamos chorizo, lo repartimos sobre la carne.
3. Estiramos la segunda masa y la colocamos encima. Sellamos los bordes presionando con los dedos y decoramos haciendo formas con la masa o con un tenedor. Hacemos un corte en la superficie en el centro a modo de chimenea para que salga el vapor.

Horneamos

1. Horneamos, con el horno precalentado a 200º, durante 30-35 minutos o hasta que esté dorada. No es necesario pintar la superficie con huevo batido ya que al llevarlo en la masa, va a quedar con un dorado precioso.
2. Ahora solo queda servir la empanada caliente, cortada en raciones generosas, y dejar que el aroma llame a la mesa a todos los que estén cerca. Porque, al fin y al cabo, la mejor salsa es la compañía. ¡Buen provecho y larga vida a las tradiciones!

Consejos para una empanada gallega rellena de carne picada perfecta

• Si no tienes carne de ternera, prueba con pollo desmenuzado o atún en conserva. Para una masa más crujiente, añade una cucharadita de vinagre al amasar. Si te sobra relleno, congélalo: sirve para rellenar empanadillas o tacos.
• En algunas zonas de Galicia, la empanada se rellena con vieiras, un guiño a la tradición jacobea. También puedes usar berberechos o pulpo si quieres un sabor más marino.
• Si quieres darle un toque extra, sirve con un vino ribeiro o una sidra asturiana.

¿Sabías que en el medievo las empanadas se usaban como «tupperwares» comestibles? Los peregrinos las llevaban en sus zurrones, y la masa actuaba como conservante natural.

Última revisión: 5 agosto 2025

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