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Volkswagen Beetle Escarabajo clásico«Un Escarabajo en buen estado ronda los 5.000 euros»

Hablamos con Juan Manuel García, amante de los clásicos y propietario, entre otros, de un Volkswagen Beetle de hace 20 años. Nos explica las peculiaridades, fortalezas y debilidades de este incombustible icono automovilístico

Madrid Actualizado: Guardar
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Juan Manuel García Rubio es un gran amante de los coches clásicos, de los que posee varios ejemplares, entre ellos el Volkswagen «Escarabajo» con el que posa sobre estas líneas, que adquirió en Méjico hace veinte años. «Es de 1992, fabricado allí mismo, en Puebla; de los últimos con motor de carburación».

Explica a ABC Motor que el mantenimiento de un coche de este tipo «es sencillo y barato». Para hacerse a la idea, su refrigeración es por aire, de modo que «no no hay ni manguitos ni radiador que se oxiden». Tampoco tiene que echarle anticongelante.

El inconveniente es que «sin refrigeración líquida su motor de gasolina 1.6 bóxer (cilindros opuestos) no es capaz de dar más de los 45 CV que rinde».

De hecho, versiones posteriores de este mismo motor incrementaron rendimiento, precisamente, al añadir la refrigeración líquida, sin ir más lejos en la serie T del popular furgón Bus de la marca.

Ponerse a los mandos de un coche así, que rueda bien entre 80 y 100 km/h, equivale a dar un salto en el tiempo que nos traslada medio siglo hacia atrás.

«Cuando te haces a él puedes conducirlo a diario, pero es un coche muy descompensado, con el motor y la tracción traseros, sin servodirección y sin servofreno. Si quieres uno, mejor condúcelo primero para experimentar lo que supone».

También indica que en el mercado de repuestos hay piezas de todo tipo, «desde motores a transmisiones», y que incluso Volkswagen cuenta con un servicio propio que suministra piezas para modelos clásicos como éste. «En España —prosigue— hay casas que permiten hacerle y arreglarle todo, y aún hay más en Alemania y Estados Unidos».

Por cierto, el gasto no es tampoco un problema: pese a su veteranía, se contenta con unos 7 l/100 km de media. Y aunque es un coche

Los mejores son los de parabrisas curvo. Y es que aportaban suspensiones rectificadas.

con multitud de adeptos, también hay buena oferta en el mercado de segunda mano. Una unidad en buen estado puede rondar los 5.000 euros. Las mejores son las de parabrisas curvo (en los extremos), que incorporaban suspensiones rectificadas. Los descapotables, eso sí, mucho más llamativos no bajan de los 10.000 euros, aunque queden a «años luz» de la robustez y la estanqueidad que, sin ir más lejos, despliegan los actuales Volkswagen Cabrio.

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