BMW X1, renovación del SUV compacto
La marca germana lanza un remozado X1 con una imagen más emparentada con el último Serie 1, nuevas motorizaciones y equipamientos. Está a la venta entre 30.650 y 42.600 euros.
munich (alemania) Actualizado:Después de dos años y medio, un nuevo capítulo se añade al éxito de los modelos X de BMW, en esta ocasión de la mano del renovado X1 que, por vez primera, se lanza en los mercados americano y chino. Presentado por primera vez en 2009, registra a estas alturas casi 300.000 unidades vendidas.
Ahora, en el exterior, exhibe «riñones» a modo de parrilla más ovalados y un faldón delantero que ha perdido negro para ganar el color de la carrocería. Los faros son nuevos, con una barra led superior para circulación diurna. En la parte inferior de la carrocería, el material sintético tiene menos superficie para lograr una imagen más elegante extensible a la parte trasera, que también aumenta superficie pintada.
Por primera vez, el X1 ofrece acabados xLline y Sport Line, para reforzar la elegancia o la deportividad a base de detalles de acabado internos. Precisamente, el habitáculo es espacioso y adecuadamente versátil. Los respaldos de los asientos posteriores de inclinación regulable en un ángulo de 1 a 31 grados, y además son abatibles en porciones 40/20/40. Todo ello varía el compartimiento de 360 a 420 litros, según la inclinación de los respaldos, o hasta 1.350 litros abatiendo la segunda fila al completo. Por cierto, la climatización bizona es ahora de serie en todos la gama.
A todo ello, el chasis del nuevo X1 puede dotarse de dirección asistida eléctrica opcionalmente variable según la velocidad. También como extras, estrena asistente para cambiar, cuando la circulación lo permite, el alumbrado de cruce al de carretera y vicevrsa, cámara de visión trasera, regulación de velocidad con función Stop&Go, información de señales de tráfico, BMW Connected Drive con conexión a Internet, Facebook, Twitter e información de tráfico en tiempo real.
La actualizada gama X1 está compuesta por tres motores de gasolina de 150 a 245 CV y cinco turbodiésel entre 116 y 218 CV. Los primeros son 2.0 de 4 cilindros con Valvetronic y doble Vanos, con alimentación atmosférica, como el X1 18i, o BMW TwinPower Turbo TwinScroll (doble turbo en cascada). En particular, el 18i da 150 CV/200 Nm.
En diésel hay seis conjuntos de motor/tracción, la segunda trasera o total xDrive. La potencia se mueve entre 116 y 218 CV, y el par límite entre 260 y 450 Nm, siempre desde 1.750 rpm, salvo en el más potente, que lo hace a 1.500 vueltas. El 25d emplea TwinPower Turbo para llegar a 218 CV/450 Nm, homologado 5,9 l/100 km. Todos se asocian de serie a un cambio manual de 6 relaciones, pero en opción pueden montar otra automática y secuencial con las misma marchas, salvo el X1 18i, que la llevaría de 8 relaciones sin resbalamiento, gracias a un avanzado embrague en baño de aceite que desacopla el convertidor y consigue un accionamiento tan rápido como suave. El único X1 que no puede disponer de caja automática es el 16d.
ABC Motor ha tenido ocasión de circular por carreteras y autopistas de del sur de Alemania al volante de estos vehículos. La motorización X1 25d con caja automática de 8 velocidades sobresale por suavidad de marcha y confort es como se espera de BMW. Sorprende una suspensión más suave de lo habitual, algo que tiene sus entusiastas y sus detractores, pero que de hecho está ahí. Bien es verdad, el coche balancea un poco más de lo acostumbrado, pero mejora en gran medida el confort.