Catorce joyas del patrimonio madrileño que no se puede perder

Casa de la Demandadera

Alcalá de Henares es un tesoro en sí misma. La ciudad, declarada Patrimonio de la Humanidad, merece una visita siempre. En esta ocasión, destacamos una de sus joyas: la Casa de la Demandadera, situada en la plaza de las Bernardas, junto al Palacio Arzobispal. Sus obras se realizaron en 1617 por encargo del Arzobispo de Toledo al arquitecto Juan Gómez de Mora.

La Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid ha intervenido recientemente en este lugar, para restaurarlo, en unos trabajos financiados con el 1 por ciento cultural del Ministerio de Fomento y de la Comunidad de Madrid. Gracias a esta intervención, los espacios interiores de la Casa de la Demandadera se han vinculado al uso museístico. En su patio interior existe un vano plateresco declarado Bien de Interés Cultural en el año 1922.

Visitas: del 1 de octubre de 2013 al 12 de enero de 2014, de lunes a domingo de 10:00 a 21:00 h., con motivo de la exposición «La Sábana Santa». Teléfono de contacto (exposición): 923 19 77 62.

Complutum, el pasado romano

En el año 50 d. C., Alcalá de Henares no se llamaba así, sino Complutum: era el nombre que los romanos le dieron a este asentamiento, situado en la fértil vega del río Henares. Sus restos aún perduran, y se pueden visitar.

Complutum ocupaba cerca de 50 hectáres. El foro estaba en su centro, y era accesible desde sus dos calles principales -siguiendo la tradición urbanística romana-: el Decumano III y el Cardo Máximo.

Es posible visitar varios de los edificios: la fachada monumental, la basílica civil, las termas norte, el pórtico sur, el mercado, las termas sur, la Curia, el Criptopórtico y la red de desagües de la ciudad.

Uno de los elementos más significativos es el llamado Paredón del Milagro, un muro romano de grandes dimensiones, perteneciente al conjunto monumental, y que ha sido objeto del culto a los Santos Niños Justo y Pastor, patronos de Alcalá de Henares, a lo largo de los siglos, lo que ha permitido su conservación hasta la fecha.

Otras casas sobre las que se trabajan, en la zona, son las de Marte, del Atrio y de los Grifos, con una magnífica colección de pintura mural romana. Se trabaja en la apertura de todas ellas, y también de un Centro de Interpretación.

Este conjunto monumental está abierto al público desde el 5 de agosto de 2009. El horario de visita es: de martes a domingo, de 10:00 a 14:00 horas y de 17:00 a 20:00 horas en verano (de mayo a septiembre), y de 10:00 a 14:00 horas y de 16:00 a 18:00 horas en invierno. Cerrado los días 24, 25 y 31 de diciembre y 1 y 7 de enero. Precio: 1 euro (consulte reducciones). Teléfono de información:918 771 750

Puente del Grajal, en Colmenar Viejo

El Puente Viejo del Grajal está situado sobre el río Manzanares, en el término municipal de Colmenar Viejo, dentro del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.

Se trata de un puente cuyos orígenes podrían ser romanos, ya que se encuentra ublicado en una vía transversal del Itinerario de Antonino que atraviesa el Puerto de la Fuenfría, uniendo los territorios de Galapagar con Colmenar Viejo. En 1680 una riada se llevó el puente original que fue reconstruido con la misma traza, motivo por el que mantiene el doble tablero.

El puente, de un solo ojo, con arco de medio punto y tablero partido con dos pendientes, se asienta en la roca viva del lecho del río y está ejecutado con fábrica de sillarejo de granito en el intradós del arco, siendo el resto de la construcción de mampostería de granito. Ha sido restaurado en su totalidad en 2013 por parte de la Dirección General de Patrimonio Histórico.

Acceso: el puente del Grajal se localiza en el término municipal de Colmenar Viejo, sobre el río Manzanares, a unos 3,5 km de su centro histórico, en paralelo al puente sobre el que pasa la carretera M-618 que une Colmenar Viejo con Hoyo de Manzanares y dentro de la delimitación del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares.

Un búnker con historia

En Colmenar del Arroyo se encuentra el conocido como búnker Blockhaus-13, un resto de la Guerra Civil española. Está construido en hormigón armado, y es una de las construcciones militares más singulares de la Comunidad de Madrid.

Para encontrarlo, hay que llegar hasta Colmenar del Arroyo, en la margen izquierda de la carretera M-510 dirección Navalagamella, y desviarse poco antes de llegar al desvío a Fresnedillas de la Oliva, en un paraje dominado por dehesas.

La construcción de este búnker sigue los modelos de arquitectura militar de la Primera Guerra Mundial gestados en el frente occidental europeo. Consta de un camino circular cubierto con cuatro nidos que presentan aspilleras y troneras para fusileros y ametralladoras. En la parte superior tiene un patio interior con banqueta para arrojar bombas de mano y una estructura circular central para acoger armamento antiaéreo.

Se accede al interior del fortín por un túnel en rampa que conduce al recinto principal orientado al noreste. Desde el exterior se puede acceder a la parte superior mediante dos escaleras de hierro embutidas en el hormigón; desde aquí se comunica con el interior a través de un pequeño hueco con escalones de hierro.

La construcción de este búnker Blockhaus-13 fue encargada en 1938, para consolidar las posiciones y prevenir incursiones del ejército republicano en el área, donde había tenido lugar la Batalla de Brunete. Se planteó la edificación de 22 fortines para controlar las carreteras que comunicaban los municipios de Valdemorillo, Navalagamella, Quijorna, Zarzalejo, Fresnedillas de la Oliva, El Escorial, Robledo de Chavela, Santa María de la Alameda y las Navas del Marqués.

Algunos se comenzaron, pero el final de la Guerra abortó el proyecto, y el único que fue finalizado es este de Colmenar del Arroyo. La Comunidad de Madrid ha limpiado el interior y el exterior del fortín, y ha realizado estudios sobre sus sistemas de desagües y protecciones exteriores.

Acceso: carretera M-510 dirección Navalagamella, poco antes de llegar al desvío a Fresnedillas de la Oliva. Horario: libre.

Ermita de San Vicente, en Colmenar del Arroyo

Otra razón para acercarse a esta tranquila localidad madrileña de Colmenar del Arroyo es visitar el conjunto monumental de la antigua «Ermita de San Vicente», en la actualidad integrada en el recinto del cementerio, que se asienta sobre el cerrillo de San Gregorio.

La ermita pudo ser la antigua iglesia parroquial de San Vicente, que en los siglos XII y XIII fue la iglesia del concejo, y de la que solo queda la espadaña, el torreón que alberga la escalera de acceso a cuerpo de campanas, algunos restos de los muros de las naves laterales y el espacio de lo que probablemente fue la antigua sacristía.

La espadaña, de estilo románico, presenta una recia fábrica de mampostería de granito y está compuesta por dos huecos rematados con arcos de medio punto con cubierta típica a dos aguas y realizada con lajas de granito.

Está coronada con un cuerpo de ladrillo de factura posterior (probablemente neoclásico) que presenta un hueco con arco de medio punto que debió albergar una campana más pequeña.

El torreón, tiene en su interior una escalera con peldaños labrados en granito. Anexo al mismo, se encuentra el muro de cierre del cementerio, que en sus lados este y norte contiene parte de los muros históricos de la antigua iglesia.

De la sacristía se han conservado parte de las fábricas históricas, los dos arcos con dovelas de piedra labrada de estilo también románico, y el suelo original de baldosa cerámica. Todo el inmueble fue restaurado por la Dirección General de Patrimonio Histórico en el año 2012.

Acceso: la ermita de San Vicente Mártir está integrada en el recinto del cementerio municipal de Colmenar de Arroyo. Acceso por la M-510 dirección Colmenar de Oreja-Valdemorillo. Teléfono de contacto (Ayuntamiento): 91 865 11 02. Precio: entrada gratuita.

Los dragones de Robledo de Chavela

La restauración de la iglesia parroquial de la Asunción de Nuestra Señora, en Robledo de Chavela, trajo una sorpresa: la existencia de unas pinturas murales recientemente restauradas con dibujos de dragones. El origen del templo se remontan al siglo XIII, aunque posteriormente se produjeron ampliaciones y transformaciones estilísticas.

La iglesia corresponde al tipo de templos góticos, construidos con piedra de granito con una sobria arquitectura, de una sola nave y cubiertas con bóveda de crucería. Las pinturas, en las bóvedas, están realizadas con la técnica al seco sobre una capa de yeso. En los nervios es donde aparecen las cabezas de dragón, representaciones que, según los expertos, son relativamente frecuentes en las iglesias de la corona de Castilla en los siglos XV y XVI.

Dirección: Avda. de Juan Carlos I, 4. Teléfono de contacto: 91 899 50 56 / 626 96 40 38. Horarios: sábados de 12:00 a 14:00 h. excepto culto. Visitas entre semana o grupos, concertar previamente por teléfono. Precio: entrada gratuita.

Capilla de San Fausto, en Mejorada

En la localidad de Mejorada se encuentra la iglesia de la Natividad de Nuestra Señora, dentro de la cual, adosada a su muro sur, se puede ver la Capilla de San Fausto, construida en 1691 por Matías Román.

Ésta fue ideada como capilla funeraria, para conservar las reliquias de San Fausto que había adquirido el primer Marqués de Mejorada. Se encontraban en un cenotafio realizado en mármoles italianos de varios colores. Asimismo, fue capilla funeraria y oratorio privado de los Marqueses de Mejorada.

En este caso, primero se restauraron las cubiertas y se recuperaron las trazas de la armadura original, de par y nudillo. En una segunda fase, se intervino en el interior de la iglesia y en el cenotafio, para recuperar su configuración original.

Dirección: Avda. de la Constitución. Teléfono de contacto: 91 679 08 05. Horario: de lunes a sábado de 09:00 a 13:00 h. y de 17:30 a 19:30 h. Precio: entrada gratuita.

Real Fábrica de Tapices

Es un clásico que no debería faltar en la agenda de ningún madrileño: Felipe V fundó la Real Fábrica de Tapices en 1721 para fomentar la creación de manufacturas nacionales, y evitar tener que depender de las importaciones flamencas y francesas. Primero estuvo situada cerca de la antigua Puerta de Santa Bárbara, pero en 1889 se trasladó al edificio donde ahora se encuentra, diseñado por el arquitecto José Segundo de Lema.

Hay una zona de edificios industriales, y un edificio representativo, una chimenea y tres naves auxiliares. Es de estilo neomudéjar sobrio, ornamentado únicamente en ventanas e impostas, con ladrillo visto. Fue declarado Bien de Interés Cultural en 2006. En él se impulsa un programa de formación de nuevos artesanos, a través de las Escuelas-Taller.

Dirección: C/ Fuenterrabía, 2. Teléfono de contacto: 91 434 05 50. Horario: de lunes a viernes de 10:00 a 14:00 h. Visitas cada cuarenta minutos. Cerrado del 21 de diciembre al 6 de enero (ambos inclusive) y mes de agosto. Precio: 4€. Grupos: 3,50€. Previa reserva.

El general Martínez Campos, vigilante

Desde su ubicación en el parque de El Retiro, la estatua ecuestre del General Martínez Campos, realizada por Mariano Benlliure entre 1905 y 1907, es una obra de gran realismo, muy naturalista, que pone especial énfasis en el gesto y los detalles. Gracias a su espléndida factura, su autor recibió la Gran Cruz del Mérito Militar.

Representa al general a caballo observando el campo enemigo, descansa sobre un alto pedestal a modo de risco, decorado con relieves que ilustran sobre sus campañas bélicas y que se ornamenta con un trofeo en bronce.

El 18 de febrero de 2013 fue incoado expediente para su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).

Dirección: Parque de El Retiro, Plaza de Guatemala. Horario: invierno: desde las 06.00 hasta las 22.00 h. Verano: desde las 06.00 hasta las 24.00 h. Precio: entrada gratuita.

Las Góngoras, en las Mercedarias

La iglesia del convento de Mercedarias de la Purísima Concepción, consagrada en 1690, constituye el mejor ejemplo de arquitectura barroca madrileña de la segunda mitad del siglo XVII. Tiene una estructura sencilla, complementadacon una decoración más barroca.

Por la iglesia se distribuyen un conjunto de retablos, y en las pechinas unas pinturas murales, que la convierten en uno de los espacios más espectaculares de la arquitectura conventual del barroco madrileño. Entre esta decoración sobresale un destacado conjunto de retablos, de los cuales cuatro se sitúan en los amplios chaflanes del crucero. Los dedicados a Nuestra Señora de la Merced y a San Pedro Nolasco, pueden fecharse hacia el primer cuarto del siglo XVIII.

Destacan también dos pinturas en forma de medio punto situadas en sendas hornacinas localizadas en el primer tramo de la nave: la correspondiente al lado del evangelio representa a San Pedro Mártir y Santa Catalina de Siena, la del lado de la epístola representa a Nuestra Señora de Montserrat, de finales del XVII o principios del XVIII.

Es Bien de Interés Cultural en la categoría de monumento desde 2012. Se ha llevado a cabo la restauración de estos retablos así como del tornavoz de madera de principios del XVII ubicado a lado del retablo de San Pedro Nolasco y los dos lienzos de la nave.

Dirección: C/ Luis de Góngora, 5 y 7. Teléfono de contacto (convento): 91 532 39 53. Horarios: martes y viernes, de 11:00 a 12:00 h. Precio: entrada gratuita.

Sacramental de San Lorenzo y San José

Este espectacular cementerio se mandó construir en 1851 junto al Cementerio General del Sur. Se fue ampliando sucesivamente, a través de patios yuxtapuestos. Son muchos los personajes ilustres enterrados en la Sacramental de San Lorenzo y San José: Gustavo Adolfo Bécquer, Mariano Bellver o Raimundo Fernández Villaverde.

Dirección: C/ de la Verdad, s/n. Teléfono de contacto: 91 569 52 65. Horarios: de lunes a viernes de 08:00 a 15:00 h, sábados, domingos y festivos de 09:00 a 14:00 h. Precio: entrada gratuita.

Iglesia de Santa Bárbara

Fue la reina Bárbara de Braganza la que puso en marcha este convento de la Visitación y el colegio para niñas nobles que lo acompañaba. El conjunto fue realizado por Francisco Carlier y Francisco Moradillo entre 1750 y 1758,y tuvo que ser reconstruido, a excepción de la iglesia, por Joaquín Rojí en el siglo XX tras sufrir un devastador incendio.

La iglesia, declarada Bien de Interés Cultural el 25 de mayo de 1979, alberga una gran riqueza patrimonial donde destacan los sepulcros de Fernando VI y Bárbara de Braganza, esculpidos por Francisco Gutiérrez siguiendo diseños de Sabatini que constituyen una obra fundamental en la escultura neoclásica española.

La fachada se configura como un pórtico triple rematado por un frontón y torres laterales. Estructurada a través de pilastras de orden compuesto, se decora profusamente con guirnaldas, jarrones, escudos medallones y las estatuas de San Francisco de Sales y Santa Juana Francisca Fremiot de Chantal.

Dirección: C/ Bárbara de Braganza, 1. Teléfono de contacto: 91 319 48 11. Horario: de lunes a viernes de 09:00 a 13:00 h. y de 17:00 a 20:00 h. Sábados, domingos, festivos y vísperas de festivos de 10:00 a 13:00 h y de 18:00 a 21:00 h. Precio: entrada gratuita.

San Fermín de los Navarros, ¡riau riau!

Un 7 de julio de 1673, un grupo de devotos navarros de San Fermín fundaron la Real Congregación de San Fermín de los Navarros. La hermandad, que veneraba la reliquia de su patrón en una capilla de la iglesia del convento de San Francisco de Paula, comenzó la construcción de un nuevo templo, bajo las trazas de Eugenio Jiménez Corera y Carlos Velasco, entre los años 1886 y 1890.

La iglesia de San Fermín de los Navarros se alza siguiendo una planta de cruz latina de tres naves divididas en tres tramos, donde sobresale la central, de mayor amplitud y cubierta por bóvedas de crucería de terceletes. Consta de crucero coronado por una bóveda estrellada y cabecera poligonal dentro del estilo neogótico.

Al exterior, la iglesia responde al estilo neomudéjar toledano típico del Madrid de finales del siglo XIX. La fábrica está realizada con una combinación de ladrillo, algunos de ellos esmaltados en verde y blanco, y mampostería de pedernal.

La fachada principal presenta un arco apuntado rodeado por un alfiz moldurado de granito, enmarca el acceso al templo, a cuyos lados se colocan los escudos de España y Navarra. Sobre este, se inserta una hornacina en forma de arco de herradura apuntado, que alberga la imagen de San Fermín realizada en 1958 por Fructuoso Orduña.

El retablo mayor es realizado ya en el siglo XX siguiendo el proyecto del arquitecto José Yárnoz e incluye una escultura de bulto redondo de San Fermín, obra de Fructuoso Orduña. El 20 de abril de 1995 fue declarado Bien de Interés Cultural (BIC),.

Dirección: Paseo de Eduardo Dato, 10. Teléfono de contacto: 91 319 93 07. : todos los días de 08:00 a 09:30 h., de 12:45 a 13:45 h. y de 19:00 a 20:30 h. Precio: entrada gratuita.

Iglesia de Santa Cruz

La Iglesia de Santa Cruz se ubica en el solar que, entre 1583 y 1876, fue ocupado por el Convento de Santo Tomás de Aquino y por dos iglesias desaparecidas. Su construcción, que fue posible gracias a la suscripción popular, se llevó a cabo entre 1889 y 1902, a partir del proyecto desarrollado por Francisco de Cubas y González Montes, coordinador también de las obras junto a Miguel de Olabarría y Ricardo Guereta.

El inmueble es de estilo neogótico-mudéjar, con las fachadas y la torre de fábrica de ladrillo prensado visto. La torre, que puede verse desde las Plazas de Benavente, Santa Cruz y la Provincia y la calle Atocha, se incluyó en el proyecto como homenaje a la primitiva parroquia de Santa Cruz, cuya alta torre se conocía como la atalaya de Madrid.

Dirección: C/ Atocha, 6. Teléfono: 91 369 12 39. Horario: De lunes a sábado de 08:30 a 13:00 h. y de 17:00 a 21:00 h. Domingos, de 10:00 a 14:00 h y de 17:00 a 21:00 h. Precio: entrada gratuita.