El temor a un escenario de inestabilidad alarma a los empresarios. Hoy, sin esperar un día tras la celebración de las elecciones en Cataluña, la patronal Fomento del Trabajo ha reclamado que "la recuperación de la actividad económica y la creación de empleo son los principales" objetivos en los que deben concentrarse las instituciones, sin mencionar en ningún caso la agenda soberanista con la que Artur Mas se presentó a los comicios.
La patronal que preside Gay de Montellà, que de manera más o menos explícita ha expresado su temor a la conformación de un gobierno de coalición, conformado o condicionado, por ERC, ha exigido en una nota de su comité ejecutivo que se forme un gobierno que "aporte cohesión y estabilidad, y genere la confianza necesaria".
El recuerdo de los dos gobiernos tripartitos está aún muy presente entre los empresarios catalanes, que temen que la debilidad parlamentaria de CiU arroje de nuevo a ERC al centro del tablero político. De fondo, y aunque sin hablar de siglas, los empresarios siguen apostando por una gran coalición.
Fomento del Trabajo ha recordado que ya en su momento aprobó un documento con 100 propuestas para el nuevo gobierno, un compendio de medidas para avanzar en la reactivación económica, pero también un apoyo explícito de la patronal a que se abran negociaciones para avanzar en el "Pacto Fiscal que mejore la financiación de la Generalitat de Cataluña".




