Autobuses sin conductor circulan por San Sebastián en un proyecto pionero en España

A simple vista no llaman en exceso la atención pero es el interior, como reza el dicho, lo que importa. Los autobuses presentados esta mañana en el Parque Tecnólogico de San Sebastián, donde tendrán su ruta en pruebas durante los próximos tres meses, no requieren conductor: están automatizados, además de tratarse de vehículos eléctricos e inteligentes. Con capacidad para diez plazas y una velocidad máxima de 12 kilómetros por hora, abarcarán un recorrido de ida y vuelta de 2 kilómetros desde las 7.30 horas y hasta las 19.30 horas de forma ininterrumpida de lunes y viernes. En total, 10 paradas. El servicio es gratuito.

El acto de presentación del proyecto, que se enmarca en la iniciativa europea CityMobil2, ha estado presidido por el alcalde de San Sebastián, Eneko Goia, acompañado del presidente de los Parques Tecnológicos Vascos, José Miguel Corres, el director general de Tecnalia, Iñaki San Sebastián, y María Izaguirre, socia directora de Novadays.

«Estamos muy orgullosos», ha resaltado esta última en declaraciones a ABC. «Supone un hito muy importante, el primero en Euskadi y en España». «Es un proyecto pionero, es la primera vez que se hace en España», corrobora, también a este diario, Javier Coleto, director de desarrollo de negocio de transporte de Tecnalia, quien explica que previamente se probó en Grecia, Finlandia, Italia y Francia.

«Los sueños se van haciendo realidad. Este es el caso. Un sueño que teníamos hace 6 o 7 años, que parecía muy lejano, pero ahora es muy cercano. Trabajamos para que sea una realidad más permanente, en otros teatros de operaciones», amplía Coleto. Explica que la limitación de 12 kilómetros por hora es también provisional, para que los usuarios «vean que es seguro, que va despacio, y vayan superando las reticencias». Subraya que más de 45 entidades a nivel europeo, con su labor de investigación, han permitido la puesta en marcha del proyecto, encaminado a «llevar a la sociedad» este medio de transporte, en «teatros de operaciones reales».

Al igual que Coleto, Izaguirre subraya que «la tecnología ya está» y que el último esfuerzo se ha dedicado a trabajar en el «cambio regulatorio», en modificar las normas, lo cual se ha plasmado en una «instrucción de la DGT». Al tiempo, se han adpatado las infraestructuras para que estos autobuses puedan recorrer sin problemas el parque tecnológico. Un cambio normativo que «ha permitido que la tecnología pueda ser útil para la ciudadanía. Esa es la diferencia».

Izaguirre va más allá: «El cambio tecnológico va a transformar de manera fundamental el transporte público en los próximos años. Va a mejorar el bienestar de las personas y la calidad de vida de las ciudades. Una movilidad sostenible, además, va a permitir que los servicios sean más eficaces, y esto conlleva un crecimiento económico. De ahí la apuesta de las instituciones», concluye.