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El PSOE dice que frenó el texto de la discordia para los funcionarios; el PP pide «anularlo»

El partido de la oposición considera que la operación se puede reactivar «en cualquier momento»

Lorenzo Robisco, portavoz del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha EFE
Enrique Delgado Sanz

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No fue el de ayer el día más tranquilo para el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page , quien desde primera hora de la mañana y en sede parlamentaria tuvo que dar explicaciones sobre el decreto con el que, en caso de ser aprobado, se equipararían las condiciones del personal elegido a dedo con las de funcionarios de carrera en el momento de cubrir puestos directivos de la Administración.

Las complicaciones para el presidente comenzaron cuando Lorenzo Robisco, portavoz del PP en el Parlamento regional, subió al atril de ponentes del salón de plenos del Convento de San Gil, sede de las Cortes de Castilla-La Mancha . Desde allí, Robisco criticó duramente la redacción de este decreto y también instó a Page a que asegurara a los allí presentes -también ante los taquígrafos- que asegurara que no iba a continuar con la tramitación de ese decreto, denunciado por el sindicato de funcionarios STAS-CLM.

Page cogió el micrófono y aseguró que no iba a consentir «que se coloque a ningún amiguete» en la Administración, además de calificar la información publicada por este diario como «totalmente deformada». Sus explicaciones, sin embargo, no dejaron satisfechos a sus socios de gobierno, que echaron en falta que el presidente regional ahondara un poco más en el asunto. «No ha sido suficientemente claro», criticó David Llorente, portavoz de Podemos, tras la intervención del barón socialista.

No se fían

El PP, desde la bancada de la oposición, continuó con las críticas. «Es un decreto vergonzoso» , manifestó el portavoz del PP, quien sostuvo que con esta maniobra legal, Page pretendía «meter por la puerta de atrás a sus amigos». Los socialistas, como respuesta, negaron tal extremo en repetidas ocasiones y aseguraron que el texto no se aprobará.

Sin embargo, el PP exigió a Page horas más tarde que anulara «de manera fulminante» cualquier tramitación al respecto. Ana Guarinos, presidenta del grupo popular en las Cortes manchegas, consideró que la retirada anunciada por Page «no vale para nada» y alertó de que el proceso se podría reactivar «en cualquier momento».

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