
Pedro Sánchez y Zapatero: parecidos y diferencias
Los dos secretarios generales socialistas encierran parecidos y diferencias significativas
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12345678Primera decisión polémica: el no a Juncker y la guerra de Irak

José Bono, ministro de Defensa por aquel entonces, acude a Irak a visitar a las tropas españolas - efe El recién elegido secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ya ha dado un primer paso controvertido, que ha sido mirado con lupa: ha ordenado a los diputados europeos de su partido no votar a Juncker como nuevo presidente de la Comisión Europea. Esto ha encendido la mecha y consumado un debate encarnado en Ramón Jaúregui, número dos del PSOE en Europa, que ha asegurado que esa decisión supone romper la disciplina de voto del socialismo europeo.
Por su parte, José Luis Rodríguez Zapatero convirtió la guerra de Irak en su primera gran polémica como secretario general del PSOE. La retirada de las tropas, ya como presidente del Gobierno, supuso cumplir una promesa que anunció como número uno de la oposición.
Al igual que el no a Juncker de Sánchez, la retirada de tropas supuso un conflicto internacional y la aparición de España en los medios de comunicación internacionales.
Sánchez gana con el apoyo de Andalucía. Zapatero lo hizo con el de Cataluña

Pedro Sánchez pasea con la líder del PSOE en Andalucía, Susana Díaz - isabel permuy La procedencia de los avales y, posteriormente, los resultados electorales por provincias desvelaron el apoyo de la federación socialista andaluza a Pedro Sánchez, con más del 60% de los votos. En Cataluña, el elegido secretario general consiguió peores resultados que su rival, Eduardo Madina.
En su día, José Luis Rodríguez Zapatero llegó al trono socialista con la ayuda del PSC. Después, su política se vio condicionada por aquel apoyo y llegó a afirmar: «Apoyaré la reforma del estatuto que apruebe el parlamento de Cataluña».
De diputado desconocido a secretario general
Tanto Pedro Sánchez como José Luis Rodríguez Zapatero llegan a la cima del organigrama de Ferraz recorriendo el mismo camino, partiendo desde el escaño del Congreso.
Sánchez era diputado por Madrid y Zapatero tenía su acta a nombre de León. Además, tanto en la campaña de uno como en la del otro, se ha hablado de «sorpresas» y de «diputados desconocidos».
Sin embargo, existe una diferencia sustancial en el proceso. Pedro Sánchez se ha convertido en secretario general socialista elegido por su militancia. Zapatero, en cambio, salió de un Congreso en el que los votos no fueron fruto de la participación de los afiliados socialistas.
Los rivales a batir tenían un peso muy distinto en el partido

Los tres candidatos a la secretaría genreal del PSOE en la sede de Ferraz - afp José Luis Rodríguez Zapatero obtuvo la victoria por encima del eterno presidente de Castilla-La Mancha, José Bono; la actual líder de UPyD, Rosa Díez; y la exministra de González, Matilde Fernández.
Pedro Sánchez tuvo como rivales a Eduardo Madina y José Antonio Pérez Tapias. Cabe subrayar que la victoria de Sánchez se da frente a un diputado y a un hombre sin un relevante pasado político, mientras que la de Zapatero se saldó con la victoria sobre un presidente de Comunidad, una exministra y un peso pesado del partido en el País Vasco.
Dos cartas de presentación distintas

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, saluda a José Luis Rodríguez Zapatero - ap Pedro Sánchez es economista. Su pasado estuvo marcado por el paso por las aulas. Después de hacer un par de posgrados en materia económica europea fue nombrado Doctor por la Universidad Camilo José Cela, donde también trabajó como profesor.
José Luis Rodríguez Zapatero, licenciado en Derecho por la Universidad de León, no llegó a ejercer la abogacía. Fue profesor de Derecho Constitucional en el mismo centro donde estudió. A continuación, y con tan solo 26 años fue nombrado diputado por primera vez.
La diferencia más significativa en estas dos cartas de presentación la marca el perfil internacional de Sánchez que Zapatero no tenía. El electo secretario general socialista habla tres idiomas y tiene un pasado como asesor en materia europea. Zapatero siempre ha reconocido no ser hábil con las lenguas extranjeras y acostumbró a llevar «pinganillo» en las reuniones internacionales.
Los dos recogen un PSOE hundido

Sánchez celebra su victoria abrazado a Rubalcaba - óscar del pozo Tanto Sánchez ahora como Zapatero en su día llegan a la secretaría general de un PSOE hundido electoralmente. Cuando el expresidente socialista llegó a la dirección de Ferraz, el partido tenía 125 escaños en el Congreso, lo que suponía una debacle en comparación con los escaños que solía conseguir Felipe González.
Pedro Sánchez se enfrenta a un reto parecido, con un número de escaños todavía inferior: 110. Después de las primarias socialistas, podrá vislumbrarse otro parecido en estas dos carreras políticas. Sánchez tendrá que volver a ganar unas nuevas elecciones antes de poder participar en el asalto a La Moncloa.
La juventud de los dos al llegar a la secretaría general del PSOE
El expresidente, José Luis Rodríguez Zapatero, en una imagen de archivo del 2000, cuando alcanzó la secretaría general - JAIME GARCÍA Pedro Sánchez nació en Madrid, en 1972. José Luis Rodríguez Zapatero lo hizo en Valladolid, en 1960. Tanto Zapatero como Sánchez llegan a la secretaría general rondando los cuarenta.
El diputado por Madrid ha ganado las primarias que le han otorgado el puesto con 42 años, dos más de los que tenía Zapatero en el 2000, cuando salió victorioso del Congreso socialista.
Un lenguaje parecido

Zapatero coloca el micrófono durante un mitin en la época en la que lideraba Nueva Vía - efe Tanto Zapatero como Sánchez dieron espacio en sus campañas a la igualdad, la regeneración, las raíces y la diferenciación de la izquierda con la derecha.
Sánchez ilustró esa regeneración con el lema «Unidad y cambio», mientras que Zapatero encabezó un grupo conocido como «Nueva Vía», corriente reformista del PSOE que lideró el expresidente y que se disolvió, por lo menos en su forma, cuando el de León alcanzó la secretaría general.




