Con tres modelos en la actual gama, el GTC y el potentísimo OPC de 3 puertas, el Astra de 5 puertas y el familiar Sports Tourer, Opel necesitaba un sedán de 3 cuerpos que cerrase la oferta. Visto el éxito del Insignia, no era de extrañar que la marca lo tomase como referencia para alumbrar el nuevo Astra Sedan. Visto por la calle y sin referencias es fácil confundir uno con otro y eso no es, ni mucho menos, malo. Habla muy bien de lo acertado del diseño del modelo más grande. Por otra parte, y aunque parece querer desligarse de la gama, no faltará a medio plazo un nuevo descapotable de estructura y tecnología compartidas con ésta llamada Cascada.
No es fácil crear una berlina de 3 volúmenes con medidas contenidas para el segmento C. Además, en estos casos se suele buscar un maletero grande que aumente la practicidad del 5 puertas del que proviene y generalmente son coches muy prácticos, pero de dudosa gracia en cuanto a diseño. Pero como ya hemos comentado, el nuevo Astra Sedan ha tomado como referencia a su hermano mayor el Insignia, y la marca ha conseguido un coche bonito de cotas ajustadas. Su maletero, con 460 litros, suma 90 más que la berlina de 5 puertas.
Por cierto, el diseño frontal de toda la gama ha recibido un rejuvenecimiento muy acertado, ahora de aspecto más deportivo con entradas de aire más anchas, nuevas llantas (según versiones) y nuevas salidas de escape, más deportivas. Dentro no hay cambios grandes, sólo telas y colores que en el caso de las nuevas variantes BiTurbo implican revestimientos e incluso piel Jet Black con remates y costuras rojos en los bordes de los asientos, los paneles de las puertas y el fuelle de la palanca del cambio, junto a un volante achatado en la zona baja. El salpicadero sigue pareciendo el cuadro de mandos de un avión por la cantidad de botones disponibles.
Al hilo de la llegada del Astra Sedán se han sumado 2 magníficos propulsores que redondean la oferta por la parte alta en cuanto a potencia y rendimiento. En diésel, el Astra ahora incorpora el 2 litros BiTurbo de 195 CV y 400 Nm, con 2 turbocompresores que trabajan de forma secuencial y un doble intercooler que ya utiliza el Insignia y tan buenos resultados está dando. Con este motor el consumo del Astra GTC (desde 23.335 euros) queda, en ciclo combinado, en 4,9 l/100 km, que son 5,1 para los Astra 5 puertas y Astra Sports Tourer (en variantes de acceso, a partir de 17.815 euros), con velocidades máximas de 223 a 226 km/h.
La otra bestia del asfalto es el nuevo motor de gasolina y 280 CV que pasa a ser el motor más potente en la historia del modelo, y que equipará al nuevo Astra GTC OPC. Este propulsor 2.0 turbo de gasolina, con inyección directa, es una evolución del anterior de 250 CV, modificado para aumentar tanto en potencia como en par límite, ahora de 400 Nm. Con todo, acelera de 0 a 100 en sólo 6 segundos, alcanza una máxima de 250 km/h y recorre 100 km con 8,1 litros en el ciclo combinado. Para este motor y para el diésel BiTurbo el cambio es manual de 6 velocidades. También disponen de Stop/Start.
