Hazte premium Hazte premium

«Caso Asunta»: La crueldad de unos padres señalados

El levantamiento del secreto de sumario dejó al descubierto gestos y detalles que, de confirmarse, delatarían la crueldad de unos padres a los que se les acusa de asesinar a su propia hija

«Caso Asunta»: La crueldad de unos padres señalados abc

p. a.

La detención y posterior encarcelamiento de los padres de la pequeña Asunta, apenas cuatro días después del hallazgo de su cadáver, marcaron el ritmo de una investigación trufada de dudas y crueldad . Y es que, según expone el juez en el auto notificado a las partes, los padres de la menor adoptada once años atrás no solo acabaron con su vida sino que, presuntamente, planearon el crimen con meses de antelación.

De tantear su muerte suministrándole pastillas sedantes durante «al menos tres meses» acusa el juez Vázquez Taín al padre de la fallecida. Una versión que apoyaría el testimonio de Rosario Porto, que habló de los «polvos blancos» que su exmarido daba a la niña . Pero la frialdad con la que supuestamente se tejió este crimen va más allá. Según los investigadores creen, la niña ingirió las pastillas durante una comida con sus padres . Después, Rosario Porto se la llevó al domicilio familiar de Teo, escenario elegido para esperar a que los medicamentos hiciesen efecto y adormilasen a Asunta. Un largo tiempo en el que su madre debió ver cómo la pequeña se iba durmiendo hasta que confirmó que no iba a ofrecer resistencia cuando la asfixiase, siempre según mantiene el juez, con un pañuelo o una almohada.

Pero el desapego que la madre mostró con su hija no queda ahí. Con su cadáver en la casa, el juez mantiene que la abogada esperó a que anocheciese para subirla al coche y deshacerse de ella en una pista forestal. Un lugar hasta el que Asunta fue arrastrada por su madre, que tuvo tiempo para activar y desactivar la alarma de la casa en la que, presuntamente, se produjo el cruento crimen. Una acción que Porto habría planeado cometer en solitario, pese a que el juez señala a su exmarido como autor ideológico del crimen.

Tranquilidad y frialdad

Más tarde, y con la niña ya muerta, los padres se personaron en la comisaría de Policía portando unas fotos de la menor . Tras la localización del cadáver, los dos acudieron juntos al tanatorio y recibieron el sentido pésame de amigos y familiares, que acudían al velorio destrozados por la fatal noticia. Algunos notaron la tranquilidad con la que la madre se comportaba, pero nadie sospechó.

Pocos minutos después de la incineración de la pequeña se producía la detención de Porto , que no asistió al funeral de su hija. Sí lo hizo Basterra, que se había despedido de su hija después de la comida del día anterior, y que ahora lo hacía definitivamente . De él, el más introvertido de los dos , aseguran que fue el autor intelectual de un crimen que acabó con la vida de la pequeña con la que todos los días paseaba de la mano .

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación