Suscribete a
ABC Premium

La Generalitat no ha pagado aún el corazón artificial de Eufemio

El vicepresidente de la empresa que proporcionó en aparato asegura que el gobierno catalán ni siquiera les ha autorizado aún a facturar el corazón, cuyo coste asciende a 100.000 euros

La Generalitat no ha pagado aún el corazón artificial de Eufemio EFE

EFE

La Generalitat no ha pagado aún los 100.000 euros de coste del corazón artificial colocado en noviembre en el Hospital de Bellvitge a un paciente que falleció esta semana, según ha informado hoy el vicepresidente de la empresa de soluciones hospitalarias Pàlez, Joan Knuth, que proporcionó el aparato.

Knuth, que ha participado hoy en un coloquio en Barcelona con representantes del departamento de Salud, de los usuarios del sistema sanitario, de sindicatos y de instituciones colegiales, ha explicado que la Generalitat ni siquiera les ha autorizado aún a facturar el corazón.

El vicepresidente de Palex ha mencionado este caso como un ejemplo de los numerosos impagos por parte de la Generalitat a las farmacéuticas y empresas proveedoras de maquinaria hospitalaria, que, en su opinión, afectan a la viabilidad de estas compañías.

"Nosotros ya hemos tenido que pagar el coste de la producción de la máquina a nuestros proveedores y aún no la hemos podido facturar a la Generalitat", ha destacado el directivo de Palex, quien ha lamentado el fallecimiento del receptor del dispositivo.

Knuth ha explicado que su compañía proporcionó el dispositivo que el pasado 29 de noviembre los doctores de Bellvitge instalaron en Eufemio García, lo que lo convirtió en el primer hombre de Cataluña que podía hacer vida normal en su domicilio con un corazón artificial.

El dispositivo, llamado Incor y que tiene un coste de 100.000 euros, no sustituye al corazón entero, sino que es una turbina que complementa la función de bomba que realiza el ventrículo izquierdo, extrayendo sangre para llevarla a la aorta torácica con un flujo continuo.

Todo el sistema es intracorpóreo excepto un cable que sale por el abdomen y que está conectado a una unidad de control y a dos baterías con una autonomía de hasta 5 horas y media cada una.

El receptor de este corazón, Eufemio García, murió el pasado día 20 de febrero, a las 24 horas de que su caso fuera presentado a la prensa.

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación