La huelga de basuras se esparce en el tiempo y llega a los cuarenta y dos días de conflicto. Nunca ha habido una huelga tan larga en España. Con los desperdicios en la calle, en estos momentos, hay sesenta y tres puntos críticos que no invitan a pasear cerca de ellos. Pese a los servicios mínimos no hay forma de devolver la limpieza a las calles de Lugo y a los vecinos les va a tocar seguir amontonando paciencia porque ni empresa ni trabajadores consiguen levantarse del sillón de las negociaciones con un acuerdo. Por el momento piden que se retiren las sanciones al comité de huelga, solo entonces volverán a tratar los aspectos económicos. Esta semana se prevé otra reunión en la que se intentará no dejar el acuerdo tirado por los suelos.

