Quiche de atún

Quiche de atún

Icono personas Para 6Icono euro 1.75€/pers.Icono calorias 350kcal/100g

Ingredientes

  • 200 ml de nata para cocinar (o leche evaporada)
  • Para la base:
  • 200 g harina de trigo
  • 100 g mantequilla muy fría
  • 1 pizca de sal
  • 6-8 cucharadas de agua muy fría
  • Para el relleno:
  • 3 huevos
  • 2 latas de atún en aceite bien escurridas (unos 150 g netos)
  • 100 g de queso rallado (emmental, mozzarella o el que más te guste)
  • 1 cebolla
  • 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
  • Sal
  • Pimienta negra

La quiche es ese tipo de receta que lo tiene todo: es apañada, sabrosa, se puede comer fría o caliente y encima sirve para aprovechar lo que tengas por la nevera. Pero cuando hablamos de la quiche de atún, estamos ante una de las combinaciones más agradecidas que hay. 

No necesitas ingredientes raros ni mucho arte en la cocina: con cuatro cosas básicas montas una comida o cena resultona que gusta a todo el mundo. Y si te sobra… ¡mejor! Al día siguiente está aún más rica.

Aunque la quiche es un clásico de la cocina francesa, concretamente de la región de Lorena (quiche lorraine, con bacón y queso), con el tiempo se ha convertido en un plato internacional y camaleónico. 

En España, las versiones con verduras, queso, atún o jamón cocido han conquistado muchas cocinas por su facilidad y lo bien que quedan. La combinación de atún, huevo y queso es de las más populares por su sabor suave y porque siempre hay una lata de atún a mano.

Si te va este rollo de tartas saladas que resuelven comidas sin complicarse, la quiche de espinacas y queso de cabra es otra joya muy fácil y sabrosa. También puedes probar la quiche de calabacín, una mezcla perfecta entre verdura y sabor potente. Y si prefieres una opción sin masa, el pastel de atún frío con pan de molde es ideal para los que quieren algo más rápido y fácil.

Receta de quiche de atún

Preparación paso a paso

Masa quebrada

  1. Introducimos la harina en un recipiente amplio y hondo, añadimos la mantequilla (que ha de estar bien fría) en pequeños trozos, un pellizco de sal y otro de pimienta negra.
  2. Mezclamos con los dedos hasta conseguir una textura que recuerde a migas.
  3. Agregamos ahora el agua helada -poco a poco- y seguimos trabajamos con los dedos, evitando excedernos para no calentar la masa.
  4. En cuanto todos los ingredientes estén ligados, envolvemos la masa con papel film, la aplastamos ligeramente y la dejamos reposar en la nevera durante 30 minutos.
  5. Transcurrido el tiempo de reposo estiramos la masa con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada, hasta un par de milímetros de grosor.
  6. Cubrimos la base y paredes de un molde desmoldable de 20 cm de diámetro apto para horno. Recortamos el sobrante y rematamos los bordes con los dedos con alguna filigrana para que quede presentable. Guardamos el molde forrado con la masa base en la nevera hasta el momento de rellenar y hornear.

Relleno

  1. Escurrimos el atún y reservamos.
  2. Pelamos y picamos finamente la cebolla.
  3. En una sartén pequeña, calentamos una cucharada de aceite de oliva y la sofreímos a fuego bajo durante unos 10 minutos, hasta que esté blandita y empiece a dorarse. La retiramos del fuego y dejamos que temple un poco.
  4. En un bol grande batimos los huevos, añadimos la nata para cocinar, sal, pimienta y una pizca de nuez moscada si nos gusta. Removemos bien.
  5. Incorporamos el queso rallado, el atún escurrido  y la cebolla pochada atemperada. Mezclamos todo hasta que quede bien repartido.

Terminación y horneado

  1. Sacamos el molde de la nevera y vertemos dentro la mezcla del relleno.
  2. Lo llevamos al horno, precalentado a 180 °C con calor arriba y abajo, colocando el molde en la base. Con este gesto la masa quedará bien cocida sin necesidad de hornearla antes.
  3. Después de unos 30-35 minutos, o cuando la superficie esté dorada, retiramos el molde del horno y dejamos que la quiche se atempere unos minutos antes de desmoldar y servir.

Consejos para una quiche de atún perfecta

  • Podemos servir la quiche en caliente, reposada unos minutos tras salir del horno, o en frío. Está muy rica incluso recién sacada de la nevera.
  • Puedes ayudar a que tu quiche tenga más sabor y un toque distinto añadiendo queso de cabra o queso azul. Verás qué rico queda el relleno.
  • La nata líquida se puede sustituir por crème fraîche, yogur natural, leche evaporada u otro lácteo.
  • Si te sientes creativo puedes probar otras combinaciones para tu quiché. Puedes preparar el tradicional quiche Lorraine, usar solo verduras en el relleno, añadir pescado, mezclas de queso, etc.  Las combinaciones son infinitas, solo le tienes que echar imaginación.

Última revisión: 12 noviembre 2025

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