Fácil 
30 min 
Por Damián Serrano
Para 2
3.4€/pers.
210kcal/100g
Ingredientes
- Para la pasta:
- 230 g de mezzelune rellenos de ternera y Merlot (pueden ser frescos o caseros)
- Sal
- Para la salsa:
- 1 diente de ajo
- 40 g de anacardos tostados (sin sal)
- 10 g de hojas de albahaca frescas
- 30 g de queso Parmigiano Reggiano rallado
- 50 ml de aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra al gusto
- 1 limón (opcional)
- Para decorar:
- Unos anacardos tostados y picados
- Hojas de albahaca fresca
- Parmigiano Reggiano rallado
Hay platos que no necesitan presentación, pero este, aunque no sea famoso en Instagram, te va a dejar sin palabras. Imagínate esa mezcla entre lo cremoso de la salsa de anacardo con el aroma fresco de la albahaca y el toque potente del queso… Ahora súmale unos mezzelune rellenos de carne de ternera cocinada con un buen vino Merlot.
Vamos, que esto no es una receta, es una declaración de amor en forma de pasta. Perfecta para una comida especial, para cuando quieres impresionar sin liarte demasiado o simplemente para darte un homenaje de los buenos, que te lo mereces.
Los mezzelune, que literalmente significa “medias lunas”, son una pasta rellena típica del norte de Italia. En este caso, van rellenos de carne de ternera cocinada con vino Merlot, lo que les da un sabor profundo, elegante y algo gourmet.
La salsa que los acompaña no es la típica de nata ni de tomate. Aquí tiramos por algo más tradicional con un toque diferente y moderno: una crema suave hecha a base de anacardos, albahaca y Parmigiano Reggiano, que recuerda ligeramente a un pesto, pero mucho más cremoso. El resultado es un plato muy aromático, con una textura sedosa y un contraste de sabores brutal entre lo carnoso del relleno y lo fresco de la salsa.
¿Te va este rollo de pasta rellena con salsas que se salen de lo típico? Pues apunta bien, porque aquí van otras recetas que también lo petan. Prueba los mezzelune de boletus y trufa en salsa de champiñones y castañas crujientes, donde se mezclan aromas de bosque y una textura alucinante. Otra opción para flipar es el capellacci rellenos de chantarella y Grana Padano, pura fantasía para los que buscan sabores elegantes. Y si lo tuyo es el contraste entre dulce y salado, no dejes pasar los raviolis rellenos de calabaza en salsa de puerros asados y miel. Todas ellas son una delicia para quienes quieren pasta gourmet con un punto original.
Receta casera de mezzelune rellenos de ternera y Merlot en salsa de albahaca y anacardo
Ingredientes para preparar esta receta
Preparación de la salsa
- Preparamos la salsa. Lo primero es ocuparnos de los anacardos. Esta vez los estoy usando ya tostados por comodidad, pero si los tienes al natural, los puedes calentar en la sartén hasta que se doren ligeramente o darles un golpe de horno o air fryer. Luego, vamos pelando el ajo y lavando y secando bien las hojas de albahaca.
- Hacemos la crema. En el vaso de la batidora ponemos los anacardos, la albahaca, el diente de ajo y el aceite de oliva. Trituramos bien hasta obtener una crema lisa. Si ves que queda muy espesa, no te preocupes, que luego podemos corregir este punto.
- Transferimos la mezcla aun bol grande y juntamos con el queso rallado. En este punto, salpimentamos al gusto. Poca sal, ya que el queso suele estar bastante salado. Reservamos.
Cocción de la pasta y finalización
- Cocemos los mezzelune. Ponemos una olla con abundante agua y sal a hervir. Cuando esté burbujeando, echamos los mezzelune y los cocemos según las indicaciones del paquete (normalmente entre 3 y 4 minutos si son frescos).
- Cuando casi estén listos los mezzelune, sacamos un cazo del agua de cocción y lo añadimos a la salsa. Desleímos para que quede una crema homogénea y, si quieres un toque más fresco, unas gotas de zumo de limón le va genial.
- Una vez cocidos, sacamos los mezzelune con una espumadera con cuidado de no romperlos y los echamos dentro del bol con la salsa. Mezclamos con una espátula o cuchara con mucho cariño para que se impregnen bien sin romperse.
- Emplatamos. Servimos la pasta en los platos, espolvoreamos con anacardos picados, un poco más de Parmigiano rallado, alguna hojita de albahaca fresca para que quede bonito y, de manera opcional, ralladura de limón. Y a la mesa, que esto no espera.
La combinación del relleno potente con la salsa suave y cremosa lo convierte en un plato perfecto para ocasiones especiales o simplemente para sorprender un día cualquiera. Anímate a probarlo, porque vas a quedar como un auténtico chef sin necesidad de volverte loco en la cocina.
Consejos para unos mezzelune rellenos de ternera y Merlot en salsa de albahaca y anacardo de rechupete
- Si no encuentras mezzelune de ternera y Merlot ya preparados, puedes hacerlos tú con masa de pasta fresca y un relleno de carne de ternera salteada con un chorrito de vino tinto, cebolla y un poco de Parmigiano. No es difícil, pero lleva algo más de tiempo.
- La salsa de anacardo se puede preparar con antelación y guardar en la nevera. Incluso mejora de un día para otro.
- ¿No tienes anacardos? Puedes sustituirlos por nueces de macadamia o incluso almendras crudas. El sabor cambia un poco, pero sigue siendo una delicia.
- Si te gusta un punto más ácido, añade unas gotas de limón al final o un toque de vinagre balsámico.
Curiosidades de rechupete
Esta combinación de carne y vino en rellenos de pasta es bastante típica en la región del Piamonte, donde les encanta cocinar con vino tinto. De hecho, hay versiones de raviolis o agnolotti rellenos de estofado al Barolo que son puro espectáculo.
Lo curioso es que muchas de estas recetas tradicionales se están redescubriendo ahora, en versiones más modernas y con ingredientes un poco distintos, como esta salsa de anacardo que es un giro más actual y más ligero que otras salsas de nata o mantequilla. Y oye, aunque la receta suene sofisticada, al final te das cuenta de que es bastante sencilla. Basta con ingredientes buenos y un poco de mimo.
Última revisión: 14 noviembre 2025
Hemos trabajado 4 horas y 20 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?
30 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 120 min. para grabar y editar el vídeo, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.
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