Detenido un joven tras robar a rastras una máquina de rayos X de un hospital público

Este suceso ocurrió el pasado 11 de abril, en uno de los centros del Servicio Madrileño de Salud del distrito de Fuencarral-El Pardo (donde se encuentran el Ramón y Cajal y La Paz). Sobre la una de la tarde, la central del 091 de la Policía Nacional recibió un aviso desde el hospital alertando de que alguien se había llevado una máquina de rayos X de uno de los departamentos de radiodiagnóstico.

«La sustracción de este tipo de equipamientos puede crear un riesgo radiológico a las personas», precisan fuentes del caso. Seguridad Ciudadana de la comisaría del distrito dio parte al grupo de Policía Judicial. Las primeras pesquisas consistieron en dar con la furgoneta que había empleado el sospechoso para cargar la máquina y llevársela a su barrio.

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En las grabaciones de seguridad del hospital se apreciaba al sujeto con su gorra y empujando la máquina por los pasillos, hasta sacarla al exterior y montarla en el vehículo. Este fue localizado en las proximidades del domicilio del encartado, que es un varón español de 21 años con un solo antecedente policial, por resistencia y desobediencia. A través de la documentación de la furgoneta, averiguaron el domicilio del individuo.

Allí esperaron hasta las cuatro de la tarde, cuando le identificaron al ir a coger el vehículo. Los agentes lo inspeccionaron y, efectivamente, dentro estaba la máquina de rayos X. Quedó arrestado por un delito menos grave de hurto. Al parecer, el encartado no se trata de un trabajador del hospital, sino que se coló en él.

Por otra parte, agentes de la comisaría de Puente de Vallecas salvaron a dos hermanos de 3 y 4 años de haber podido morir defenestrados desde la segunda planta de su casa. Hay un familiar detenido. El suceso tuvo lugar el 16 de abril en la calle de Juan Navarro. Fuentes del caso explican a ABC que los padres de los críos se tenían que ir a trabajar, por lo que pidieron al tío de él que se quedara en casa a su cuidado.

Si los progenitores se fueron a las seis de la tarde, a las siete, el ahora encartado, se fue del piso para, según explicó, ir a comprar un coche. Y dejó a los menores allí solos.

Agentes de la Unidad de Caballería vieron a los niños encaramados en la baranda del balcón de la vivienda, un segundo piso, con evidente peligro de que se cayeran al vacío. Intervinieron y lograron rescatarlos, después de que una de las víctimas les abriera la puerta. Eran las 20.20 horas.

Una vez que localizaron a los padres, estos explicaron que en todo momento pensaron que los hermanitos estuviesen con el sospechoso. Cuando llegó, fue arrestado por quebrantamiento del deber de custodia. Es de nacionalidad nigeriana y tiene 40 años, sin antecedentes policiales. Hasta ahora.