El CIS ha confirmado lo que todos los sondeos previos apuntan. La mayoría soberanista, con el PNV a la cabeza, volverá a instalarse en el próximo Parlamento Vasco que salga de las urnas el 21 de octubre, con Batasuna (EHBildu) legalizada como segunda fuerza política (21-22 de 75 escaños). Un escenario más que favorable para que Euskadi vuelva a ser ‘pasto’ del debate identitario y retome la senda iniciada por Ibarretxe con su plan rupturista desactivado en Madrid. Se acaba así con tres años y medio de “oasis” político vasco, que la actual mayoría de PSE y PP logró imponer en la legislatura del “cambio” que ahora expira.
No habrá «sorpasso» de Batasuna
El PNV, con 27 apoyos, evitará el temido “sorpasso” de la “izquierda abertzale”, aunque su mayoría es insuficiente para gobernar, por lo que deberá elegir compañero de viaje. Los socialistas, que pierden casi la mitad de su base electoral –de 24 a 14 asientos- y el PP, que se deja entre 2 y 3 escaños (el Cis le da 9-10) ven cómo sus opciones de plantar cara a los soberanistas en la Cámara Vasca se debilitan. Al estilo de CiU en Cataluña, el PNV ya ha anunciado que si llega al Gobierno impulsará una consulta para que la ciudadanía vasca ratifique si desea la independencia.
El voto indeciso
Pero la fotografía electoral que arroja la encuesta del CiS –que otorga tres escaños a IU y deja sin representación a UPyD-, podría verse alterada por el elevado número de ciudadanos que afirman no haber decidido aún su voto. Así, hasta un 37,1 por ciento está aún en el aire, lo que podría alterar notablemente unas y otras balanzas. Este dato se repite en todos los estudios de los partidos –se habla del 25% de indecisos- que apuntan a que la batalla estará en ver quién logra convencer más en las próximas dos semanas.
PP y PSE asumen de partida que el voto nacionalista está muy movilizado y que toca llamar al constitucionalismo a rebato. “Si no vas, ganan ellos”, es el lema de los populares vascos, que ven cómo el CiS confirma su otro eslogan de “somos más del 51%”, en alusión a los ciudadanos que se sienten “vascos y españoles”. En concreto, un 50,5 % de la ciudadanía no se considera “nacionalista vasco”, según los datos del CiS de hoy.




