La prensa anuncia periódicamente la próxima boda entre el Príncipe y Charlene, que suele acudir junto con el soberano a numerosos actos, pero que nunca lo ha hecho durante las festividades del Día Nacional. Los monegascos esperaban que esta vez la pareja (que nunca ha comentado su relación) decidiera romper esta tradición y posar desde el balcón de Palacio. ¿Qué mejor momento que la fiesta nacional para dar buenas noticias?

Sin embargo, la esperada foto de Charlene como prometida oficial deberá esperar, y en esta ocasión las celebraciones siguieron su curso habitual.

Asimismo, hubo otra baja, la del príncipe Ernst de Hannover, que también estuvo ausente. Esto, sin embargo, era esperable, ya que desde hace algunos meses la prensa habla de la separación de Carolina de Monaco y su esposo como si ya fuera un hecho; lo que sí es seguro es que el todavía matrimonio no vive bajo el mismo techo.