Julio Alonso es un referente en la blogosfera hispana. No en vano ha logrado consolidar Weblogs S.L., una red de blogs con mucha identidad y que actualmente cuenta con 38 bitácoras especializadas y con gran seguimiento de audiencia en cada uno de sus ámbitos temáticos. Activista y defensor de los derechos de los usuarios en internet, tiene claro que las descargas están ocultando el verdadero debate, el que realmente interesa y que tiene como fundamento un nuevo entorno que proteja los derechos de autor en el escenario digital sin restringir el derecho a la cultura.

¿Cómo sobrevive una empresa como Weblogs S.L en un contexto de crisis como el que estamos viviendo?

Pues mira, lo bien o lo mal que lo hacemos ahora tiene que ver con lo bien o lo mal que lo hemos hecho en años anteriores. Obviamente hay una curva económica descendente que nos impacta a todos, a toda la economía. En los medios tradicionales se suma además el proceso de migración hacia lo digital, y esas dos curvas se tocan y se retroalimentan una y otra; para los medios digitales pasa al revés, esta curva va en positivo y, según cómo te hayas posicionado antes, puede llegar a compensar o incluso ser superior a la negativa.

¿Con cuántos blogs cuenta la empresa? ¿De qué temáticas tratan?

Tenemos 38 blogs. Nuestro modelo es una empresa de medios especializados, exactamente igual que el modelo de revistas especializadas, sólo que en internet y sobre plataforma blog, que añade una serie de capacidades muy interesantes. Empezamos con Xataka a finales de 2004, que es de tecnología, y luego fuimos abriendo el abanico a otras temáticas en las que concurren tres elementos: que siendo segmentos de interés haya un potencial suficientemente alto de tráfico, segundo que haya interés publicitario y tercero, que tengamos talento y un equipo editorial que sea capaz de hacer esa temática.

Nos puedes dar alguna cifra relacionada con el tráfico en Weblogs S.L. de los últimos seis meses…

En términos de tráfico, hemos debido de crecer en torno a un 40 ó 50% tanto en páginas vistas como en usuarios únicos. Y además es un crecimiento combinado, porque siguen creciendo las publicaciones grandes, pero también las pequeñas, las que acabamos de lanzar. Y, por otro lado, nos crece el tráfico en general, aunque nosotros miramos mucho el tráfico subyacente, que es el tráfico directo después de quitar el de los buscadores, que ha crecido también, porque al final si eres una publicación tradicional con versión digital tienes una marca del medio que lleva creándose durante décadas y que te arrastra mucho público y tu fuente principal de tráfico es gente que te leía en papel y que se ha pasado al digital. Para los que hemos nacido en internet, nuestro tráfico nuevo viene de los buscadores, a través de los que llegan usuarios que no nos conocían y que después se hacen lectores habituales.

¿Cuál es la bitácora emblemática de Weblogs?

Siento debilidad por Xataka, que fue el primero y que dio lugar a todo lo que ha venido después. Y sigue siendo el más grande, junto con Motorpasiontv y VidaExtra. De los nuevos, los dos que mejor están funcionando son Mensencia, que es un blog de temática de moda y estilo de vida masculino. Es el mejor lanzamiento que hemos hecho, pues el primer día conseguimos 50.000 páginas vistas y está teniendo un crecimiento de tráfico muy rápido. El otro es Arrebatadora.

Ha surgido en varias ocasiones, me refiero al eterno debate sobre si han muerto o no los blogs, ¿cuál es tu opinión al respecto?

Me gusta mucho una teoría que tiene José Luis Orihuela, él diferencia varias cosas: tienes o no un blog, o participas o no en la cultura bloguer. Lo tradicional es que tengas un blog y participes en la cultura de los blogueros, aunque existe también la posibilidad de que ni tengas blog ni participes. Pero hay además otras dos: los que tienen un blog pero no participan de la cultura bloguer –no contestan comentarios, no enlazan a nada- y los que no tienen blog pero sí participan de esto, leen blogs, comentan... son los que llamamos «bloguer homeless», que participan de la conversación y en el entorno de la blogosfera. Esta explicación me parece más interesante.

Sí, pero es evidente que muchos blogueros están abandonando este formato y se están pasando a otras herramientas como el microblogging, entre otras razones, porque no requiere esfuerzo

En 2004-2005 el blog era la única herramienta que se utilizaba para publicar contenido, aunque había gente que lo utilizaba para usos más sociales, que es lo que ahora se busca con Twiter, Tuenti, Fackbook. Un blog, efectivamente, requiere contenido y constancia en la publicación. Y yo además soy partidario de que los blogs tengan una línea temática y editorial razonablemente continuada. A veces la temática es un “soy yo”, pero en general los que funcionan bien y tienen éxito son los que tienen una temática especializada. Lo que está pasando es que hoy en día no todo el mundo se abre el blog, porque esa parte de comunicación está en otras plataformas y además también hay que pensar que ambos fenómenos están interrelacionados. La gente que tiene Twitter lee también blogs, participa… es el mismo entorno. En cualquier caso, el fenómeno de los blogs cuando se va madurando se hace más complejo.

Otros temas de debate actuales son la neutralidad de la Red, las descargas, el nuevo modelo de derechos de autor en internet... Precisamente, hace unos días se celebró en Madrid una manifestación en defensa de estos asuntos liderada por la Asociación de Internautas. ¿Qué opinas sobre este debate? ¿Compartes la idea de que se hagan movilizaciones?

Tengo una postura muy clara en torno a estos temas, pienso que la neutralidad en la red es fundamental y que en el debate sobre contenidos y derechos de autor en internet nos estamos dejando llevar por los intereses económicos de las industrias culturales del siglo XX y es un debate que hay que recontextualizar, pues de lo que debemos hablar es sobre cuál tiene que ser el entorno de protección de los derechos de autor en el siglo XXI con las tecnologías que tenemos y cómo se equilibra la balanza entre los derechos de explotación comercial de obras y el acceso a la cultura de la sociedad.

No creo que tengamos que ir a un sistema en el que todo es gratis, creo que esos son argumentos demagógicos que intentan descentrar el debate y creo que hay que tener una conversación muy sosegada sobre cómo hacemos para que los autores puedan tener recompensas económicas que valgan en este nuevo entorno y que a la vez eso no signifique una merma de derechos para la sociedad. Y, sobre todo, una cosa que a mí me enfada mucho: las industrias culturales, que se han aprovechado de la creatividad anterior de los autores, están tratando ahora de manipular el entorno legislativo para que los que vienen después creando no puedan hacer lo mismo con sus obras. Esto es intolerable. Además, se está ocultando el verdadero debate con las descargas, cuando no estamos hablando de eso. La descarga es otra cosa, hay que ir a la raíz del asunto.

En cuanto a las movilizaciones, te diré que los internautas en general tenemos un reto y es demostrar que somos capaces de ser una fuerza que influye, que nuestra opinión sea tenida en cuenta en un entorno fuera de internet y que no nos limitamos a la pataleta en nuestro blog o en twitter, donde nos sentimos muy ufanos.