Crema casera de champiñones y nata

Para 2 1€/pers. 210kcal/100g

Hoy nos animamos con una crema de champiñones con nata, suave y bien ligada, perfecta para mojar pan sin remordimientos. Verás que el paso a paso es directo y sin misterio, con trucos para que salga fina y con sabor potente.

La clave de esta salsa es el uso de ingredientes frescos y de calidad, lo que combina muy bien con la nata o crema, de hecho los champiñones con nata salen riquísimos. Además de ser fácil de preparar, la salsa de champiñones es sumamente adaptable. Este acompañamiento es sin duda una opción infalible que hará destacar cualquier plato al que se añada.

Ya sabes que los champiñones dan decenas de opciones para hacer dentro de la cocina, en el blog puedes probar a preparar champiñones al ajilo, champiñones rellenos de jamón y queso al horno, la tortilla de champiñones, los champiñones rellenos de verduras o los champiñones guisados con ajo y perejil. Todas con un gran sabor y pueden quedar genial en tu menú semanal. Vamos con el paso a paso para que esta crema de champiñones salga redonda.

Receta casera de crema de champiñones

Preparación de la crema

1. Troceamos la cebolla y los champiñones (podemos emplear champiñón común, Portobello, los que más os gusten). Laminamos el ajo.
2. Ponemos una sartén con el aceite de oliva virgen extra (o una nuez de mantequilla) y sofreímos la cebolla y el ajo hasta que estén dorados. Añadimos los champiñones y pochamos hasta que estén blanditos. Añadimos el vino blanco y dejamos evaporar. Salpimentamos. Añadimos también un poco de nuez moscada, al gusto.
3. Si os gusta el toque picante, le podéis añadir un poquito de guindilla o similar.
4. Removemos todo y vertemos la nata. Dejamos que se integren bien todos los sabores. Una vez listos los champiñones con nata pasamos el contenido de la cazuela al vaso de una batidora o a un robot de cocina y trituramos hasta que quede lo más fino posible.
5. Volvemos a introducir la mezcla triturada en la cazuela y la calentamos a fuego bajo. Añadimos el caldo, echamos más o menos cantidad dependiendo de la textura que queramos para la crema, más líquida o más espesa. 
6. Mezclamos bien, calentamos 5 minutos más y servimos la crema en un bol o un plato hondo. Podemos decorar con una ramita de perejil fresco, un poquito de nata líquida y unos champiñones a la plancha.

Y hasta aquí, una crema que resuelve una cena entre semana y se luce igual en una comida de domingo. Saca unas rebanadas de pan, sirve bien caliente y deja que cada uno remate con perejil o picatostes. La repetirás más de lo que crees, palabra.

Consejos para una crema de champiñones perfecta

• Un toque de ajo, vino blanco o hierbas aromáticas como el tomillo o el perejil aportan profundidad al plato, dándole matices que sorprenden al paladar.
• Para un sabor más profundo, tostamos una parte de los champiñones en sartén aparte hasta dorar bien y los añadimos al final antes de triturar. El dorado crea notas avellana que marcan la diferencia. Si el caldo es casero, mejor aún, aunque uno de brick de buena calidad también sirve.
• La textura manda: si queda demasiado espesa, aflojamos con un chorrito de caldo o agua caliente; si está ligera, prolongamos unos minutos el hervor suave hasta que reduzca. La nata se puede sustituir por leche evaporada para aligerar sin perder cremosidad, o por un yogur natural al final, fuera del fuego, para un toque fresco.
• ¿Sin batidora potente? Tritura por tandas y cuela, sin prisa. Y si quieres adelantar trabajo, deja el sofrito hecho el día anterior; al día siguiente solo es añadir caldo, cocer y terminar con la nata. Un golpe de pimienta blanca en vez de negra da un perfil más clásico y delicado.
• Cambia parte de los champiñones por setas de temporada como shiitake, ostra o senderuelas y tendrás una crema con más matices. Un chorrito de brandy en lugar de vino blanco la vuelve más aromática, y un hilo de aceite de trufa al emplatar la convierte en plato de fiesta sin complicaciones. Para versión vegana, usa bebida de avena o soja y sustituye la mantequilla por más aceite.

Curiosidades de rechupete

• La crema de champiñones moderna bebe de la tradición francesa de los potages y crèmes, versiones sedosas de sopas ligadas con mantequilla y lácteos. El “champiñón de París” se popularizó en Europa en el siglo XIX gracias al cultivo controlado en cuevas y canteras, lo que permitió un suministro estable todo el año. Desde ahí, su sabor suave se ganó sitio en las mesas caseras y en los bistrós.
• Curiosamente, en muchos países esta crema se convirtió en “comodín” para salsas y guisos rápidos, y en España triunfa cada otoño cuando el cuerpo pide cuchara. Si sustituyes parte del caldo por el agua de hidratar setas secas, el sabor se dispara sin complicarse la vida. Y un toque de nuez moscada o pimienta blanca la acerca a los sabores clásicos de la cocina de abuela.

Última revisión: 14 octubre 2025

Hemos trabajado 4 horas y 00 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

10 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 120 min. para grabar y editar el vídeo, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.

Categorías: Recetas con champiñones Recetas con pocos ingredientes Recetas de salsas y guarniciones Recetas de verduras y hortalizas Recetas fáciles y rápidas

Etiquetas: aceite de oliva virgen caldo de verduras champiñones cocina española guindilla perejil sal vino blanco

También te encantará...

Salsa española con champiñones

Pasta Fusilli con salsa cremosa de champiñones

Salsa funghi porcini

Salsa de champiñones. La opción perfecta de acompañamiento de pasta, arroz y carne