Korokke, las croquetas japonesas

Korokke, las croquetas japonesas

Icono personas Para 4Icono euro 1.8€/pers.Icono calorias 215kcal/100g

Ingredientes

  • 4 patatas medianas
  • ½ cebolla
  • 150 g de carne picada
  • 3 cucharadas de leche o nata líquida
  • 1 hoja de laurel
  • 1 cucharada de vino blanco
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Para el empanado:
  • Harina
  • 1 huevo batido
  • Panko (pan rallado japonés)
  • Aceite para freír
  • Para acompañar (opcional):
  • Salsa tonkatsu

La poteto korokke o korokke es un tipo de croqueta japonesa que se prepara a partir de patata machacada. Se trata de un plato popular muy barato y que nos puede salvar cualquier comida o cena si visitamos Japón. Además, es una elaboración muy versátil porque nos permite agregar a la receta cualquier ingrediente que nos guste, tal y como te mostramos en la receta.

Con la restauración de Meiji a mediados del siglo XIX, la cocina occidental entró en Japón siendo ésta adaptada a la gastronomía japonesa. Tal y como ocurre con el tonkatsu o el gyudon, la poteto korokke fue un buen ejemplo de esta adaptación gastronómica a los paladares japoneses.

Origen del korokke

El korokke nace a partir de la conocida croquette francesa, y fue a principios del siglo XX cuando se fué extendiendo modificando ciertos aspectos de su composición. Por ejemplo, no se empleó un relleno preparado con lácteos ya que la industria lechera de Japón no se había desarrollado lo suficiente para abarcar ese nivel de producción, por lo que decidió emplearse patata.

Este plato puede encontrarse en cualquier puesto de comida callejero o incluso en las carnicerías japonesas, por lo que, si te entra hambre paseando por esta bonita ciudad, podrás servirte de korokke, disponible en cualquiera de los puestos que encuentres.

Variantes de korokke

Como ocurre con las croquetas preparadas con bechamel, la korokke admite infinidad de rellenos distintos. Se trata de una forma de aprovechar cualquier sobra o ingrediente que tengas en casa y que no vayas a emplear en ninguna otra elaboración.

La receta que os traemos el día de hoy se corresponde con la versión básica de esta elaboración, siendo esta la más frecuente.

Aún así, siempre puedes adaptarla a tus preferencias hasta lograr tu korokke ideal. La evolución de este plato ha sido tal, que en ocasiones la patata se deja de lado para utilizar carne picada simplemente. A este plato se lo conoce como menchi-katsu, otra preparación increíblemente común en Japón.

  • Cream korokke: esta es la versión más similar a las croquetas que conocemos y que no se suelen consumir en Japón. Los rellenos empleados son carne de cangrejo y gambas, principalmente.
  • Wagyu: en su caso, el precio asciende un poco y no son tan comunes.
  • Atún: a este tipo de croqueta puede añadírselo atún para que el sabor y la textura adquieran un carácter más especial.
  • Yasai korokke: es una croqueta que se prepara con una mezcla de patata y verduras.
  • Curry: la mezcla contiene patata y algo de curry.
  • Pulpa de soja u Okara: esta elaboración es algo más complicada si pretendemos hacerla en casa, pero en Japón podemos encontrarla prácticamente en cualquier sitio.
  • Guratan korokke: en esta ocasión no se emplea patata sino bechamel y macarrones.
  • Nikujaga: en el caso de que hayas preparado un poco de nikujaga y te haya sobrado, puedes emplear el excedente en la korokke. Tan solo es necesario agregar carne, zanahoria y patata para obtener esta deliciosa croqueta.

Aquí te traigo la receta básica: patata + carne + rebozado con panko, vamos a ello.

Receta casera de korokke

Preparamos los ingredientes

1. Picamos la cebolla muy fina y la sofreímos a fuego lento en una sartén con un poco de aceite. Cuando esté blandita, añadimos la carne picada, la hoja de laurel, sal y pimienta. Removemos bien y añadimos el vino blanco. Dejamos cocinar unos 3 minutos. Retiramos del fuego y quitamos el laurel.

2. Lavamos las patatas con piel y las cocemos en un cazo con agua fría durante unos 30 minutos o hasta que estén tiernas (podemos comprobarlo pinchándolas con un tenedor). Las pelamos en caliente con ayuda de un trapo para no quemarnos.

3. Aplastamos las patatas con un tenedor o espátula de madera hasta hacer un puré. Cuanto antes lo hagas, mejor. Añadimos el sofrito y mezclamos bien.

4. Incorporamos las cucharadas de leche o nata poco a poco, hasta obtener una mezcla suave pero densa. Dejamos enfriar completamente.

Formamos las korokke y cocinamos

5. Dividimos la masa en 8 porciones. Nos untamos las manos con un poco de aceite para que no se pegue y les damos forma, generalmente ovalada o redonda y después ligeramente aplanada.

6. Pasamos las korokke por harina, luego por huevo batido y por último por panko. Reservamos.

7. Calentamos abundante aceite en una sartén. Cuando esté caliente, freímos las korokke hasta que estén doradas por fuera. Las colocamos sobre papel absorbente para retirar el exceso de aceite.

8. Las servimos bien calientes, acompañadas si quieres de un poco de salsa tonkatsu por encima.

Te dejo una lista de acompañamientos sugeridos:

  • Estilo japonés: un poco de repollo crudo en juliana con tomate frito o ketchup.
  • Con toque dulce: calabaza asada en cubitos.
  • s completo: acompáñalas con un poco de arroz blanco o unos espaguetis con tomate.

Consejos de rechupete para unas korokke perfectas

  • Machaca las patatas en caliente. Así evitarás que se endurezcan.
  • Prueba a añadir curry al sofrito. Le da un punto muy sabroso.
  • ¿Sin salsa tonkatsu? Mezcla kétchup con un poco de salsa Worcestershire.
  • No frías demasiado tiempo. Solo queremos que se doren: el relleno ya está cocinado.
  • Puedes variar la forma. Hazlas pequeñas como nuestras croquetas o más grandes y aplanadas, como en Japón.

La korokke es una de esas recetas que, una vez pruebas, sabes que vas a repetir. Son fáciles, están buenísimas y se adaptan a lo que tengas en la nevera. Hazlas para una cena diferente, para sorprender o simplemente porque te apetecen.

Última revisión: 12 octubre 2025

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