José Luis León, jefe provincial de Tráfico de Sevilla, explicó ayer a ABC que el aumento de víctimas mortales en 2011 en las carreteras sevillanas se debe a la alta lesividad de esos siniestros, es decir, al elevado número de muertos en cada uno de ellos. En este sentido, recuerda que se produjo un accidente en la A-8002 en mayo pasado que se cobró la vida de cuatro personas y al menos ha habido otros tres accidenes en los que perdieron la vida tres personas en cada uno de ellos.
En cuanto a los dos accidentes mortales ocurridos este verano en la N-IV con escasos días de diferencia y a escasos kilómetros uno de del otro, José Luis León declaró que se produjeron en una recta en la que los conductores se relajan, se confían y bajan la guardia, razón por la que ha pedido a la Guardia Civil que incremente su presencia en la zona para que los automovilistas extremen la precaución. Como se recordará, alcaldes de la zona viajaron a Madrid para pedir al Gobierno central el desdoble de la N-IV a su paso por Los Palacios.
En cuanto a las causas de los accidentes mortales, rechaza que el mal estado de las carreteras o la decisión de permitir otra vez conducir a 120 kilómetros por hora en las carreteras principales sea la razón que explique el incremento de un 29% de muertos en las carreteras sevillanas en 2011. «De hecho, 22 de los 37 accidentes mortales habidos entre el 1 de enero y el 8 de septiembre de 2011 se produjeron por distracción del conductor», argumentó.
A pesar de que Sevilla lidera ahora el ranking de provincias con mayor número de muertos en las carreteras, José Luis Léon es optimista y confía en que se enjugarán esos malos resultados de aquí a final de año. «Esperamos cerrar el año con una caída del 10% de muertos, pero si no es así, esperamos que al menos no superemos la cifra de 2010, cuando fallecieron 64 personas en las carreteras sevillanas».
La previsión de la Unión Europea era que se redujeran los muertos en carretra en un 50% en diez años. La provincia de Sevilla ha pasado de 159 muertos anuales a 64 en 2011, lo que supone una caída del 60%. José Luis León es consciente de que «cada vez costará más bajar las víctimas mortales». El objetivo de Tráfico para 2020 es cerrar el ejercico con sólo 22 muertos, es decir, un 35% menos que ahora. En cuanto a las críticas recibidas, León se lamenta de que la Prensa no destacara con letras de oro el año en que logramos reducir el número de muertos en 36 «y sin embargo fue titular cuando aumentamos en 9 el año 2009».




