España, en una tarde olvidar, digiere las penas pensando en el más allá. Ya no sirve de nada hablar de Holanda ni buscar excusas a una derrota que no la tiene, pues fue más que evidente la superioridad del equipo de Louis van Gaal, especialmente en el segundo acto. Pero después de la primera jornada en la fase de grupos, España sólo puede pensar en que es posible y hace cuentas para llegar a octavos de final. [Así está el grupo de España]
La victoria de Chile ante Australia (3-1) complica aún más las cosas en este apretado Grupo B. Además, la abultada derrota deja al conjunto de Del Bosque en una situación más que complicada en el caso de que se produzca un triple empate a puntos entre Holanda, España y Chile. Lo que está claro es que necesita ganar los dos partidos que restan.
España debería superar a Chile y golear a Australia para compensar el 5-1 del debut. Siempre dando por hecho que Holanda vencería a Australia tal y como marca el guión y que Chile tumbara a Holanda en la tercera jornada. Sólo así el equipo de Del Bosque dependería de sí misma.
Los jugadores ya hacían cuentas en el autobús de regreso al aeropuerto de Salvador de Bahía, en donde les esperaba un avión para volar a Curitiba. Dos horas y media de reflexión en las que hubo conjura para invertir la delicada situación.
Criterios de desempate
En caso de empate lo que primero cuenta para deshacerlo en el Mundial es la diferencia de goles general, después la cantidad de tantos que ha marcado cada uno y en tercer lugar los puntos sumados entre los equipos que sigan empatados tras utilizar las dos primeras variables.
España, sin embargo, da casi por descartada la primera plaza del grupo y eso implica que tenga un previsible cruce con Brasil en los octavos de final siempre que la anfitriona acabe campeona de su grupo.






