TEXTO: J. P.

FOTO: RAFAEL CARMONA

CÓRDOBA. El centro de planificación familiar de Estrella García Piñero abrió sus puertas en Córdoba hace 25 años. Durante todo este tiempo, los métodos contraceptivos han experimentado un importante avance.

-¿Cómo ha evolucionado la demanda de la píldora postcoital?

-Cuando empezamos lo que se daba era una dosis hormonal que hacía el mismo efecto. Es un método contraceptivo, evita la concepción, si la mujer está embarazada no hace que aborte. La píldora que existe ahora lleva unos cinco años y desde que comenzó ha subido la demanda social.

-¿Cuál es el nivel sociocultural de quienes acuden a su consulta? ¿Está relacionado con el uso de la píldora?

-No estamos hablando de que cuanto más inculto se es más se pide. Al revés, hay que tener una cierta formación, intuición y nivel. Las personas de un nivel muy bajo no se atreven a pedir la postcoital. No obstante, está más relacionado con la edad que con el nivel educativo y social. La pide más el joven hasta los 25 años. Los de nivel cultural más bajo tienen más fallos y abortos porque no vienen.

-Ahora la píldora «del día después» se venderá sin receta en farmacias. ¿Es posible que aumente la dispensación?

-No ha cambiado ni va a cambiar nada. Los centros de planificación no van a notar nada. El uso va a seguir siendo el mismo. El sector que se va a ver beneficiado de la venta en farmacias es la pareja más estable, de una edad y nivel adquisitivo más alto que no quiere pasar por todo el protocolo que lleva que la Seguridad Social le dé la píldora porque a veces por diversos motivos hay pérdida de tiempo. Pero no creo que el joven vaya a ir a la farmacia teniéndola gratuita en el centro de salud.

-¿Conoce casos en los que se haya pedido en su centro la píldora en varias ocasiones pese a que es excepcional?

-Ocurre en un sector concreto de gente joven. Sabemos que la postcoital no es un método anticonceptivo, es puntual para prevenir. Personalmente, la chica que me pide dos veces en un año la postcoital, instantáneamente le digo que, además de preservativo, utilice otro método para prevenir. Cuando hay problemas con el preservativo abogamos por un doble método.

-¿Y qué puede ocurrir en las farmacias con las personas que suelen pedir la píldora a menudo? Usted les cambiaba el método pero ahora pueden ir a la farmacia y comprarla cada mes en una distinta.

-No creo. Primero porque a un joven le sale más barato una píldora anticonceptiva que pagar veinte euros por la postcoital. Además, la chica que la tome dos veces en el mes le trastoca la regla y se va a asustar, la misma mujer va a racionalizar. Además se pone en las farmacias un folleto.

-¿No cree que vaya a llevar a pensar a los jóvenes que «esto es Jauja»?.

-Los expertos creemos que no van a aumentar las conductas de riesgo. No se va a dejar de usar el preservativo, estamos haciendo hincapié en eso. No se pueden dejar de utilizar todos los métodos anticonceptivos para tomarse una píldora postcoital. Sin embargo, vemos que podríamos reducir los abortos con el tiempo. No es una panacea, ni es a corto plazo, pero a largo plazo la accesibilidad a un método que evita determinados embarazos evitará poner en la disyuntiva a una mujer de si quiere seguir o no.

-¿Cuáles son las contraindicaciones de la píldora?

-Muy pocas. La OMS habla de una seguridad muy completa. Si no fuera así, no se habría ido a la libre dispensación. Salvo excepciones tiene mucha seguridad.

-Ya que trata con personas jóvenes y es experta en planificación familiar, ¿cree que una chica de 16 años está preparada para decidir si debe abortar?

-Respeto la decisión de la mujer pero me gusta ver cada caso. La madurez de una niña de 16 no es la misma para todas, los padres deberían tener el derecho a intervenir.