La crisis sigue haciendo estragos en el mercado laboral europeo. En julio la tasa de paro en la Unión Europea volvió a subir, en este caso una décima, hasta situarse en el 9% de la población activa, todo un récord para el Viejo Continente desde 1999.

Sin embargo, como en meses anteriores, España ha conseguido su propia «marca» la rebasar de nuevo el doble de la media. En nuestro país el paro subió tres décimas en julio hasta afectar al 18,5% de la población activa, por tanto más del doble de la media europea. En el caso de la Eurozona la tasa de paro subió también una décima hasta quedar en el 9,5% de la población activa.

167.000 parados en un mes

En sólo un mes el número total de parados en la Eurozona aumentó en 167.000 personas hasta alcanzar un total de 15,090 millones de desempleados en toda la Unión Europea. En el conjunto de los veintisiete el paro aumentó en 225.000 personas con lo que el total de desempleados se eleva a 21,7 millones de personas.

Los expertos aseguran que el paro, indicador que reacciona con un cierto retraso a los acontecimientos económicos, continuará subiendo en los próximos meses en Europa a pesar de una cierta mejora de la confianza en la marcha de la economía y del repunte del crecimiento económico en el segundo trimestre del año en Francia y en Alemania, los dos auténticos motores de todo el continente.

Esta fuerte subida del paro puede poner en riesgo la recuperación económica al ralentizar el consumo y al frenar los aumentos salariales.

Las esperanzas de la Comisión Europea es que los indicios de recuperación en Francia y en Alemania se consoliden de aquí a final de año, de modo que se pueda empezar a crear empleo neto a medio y largo plazo.

El hecho de que el paro siga subiendo y la inflación continúe en terreno negativo hará que el Banco Central Europeo tenga que pensarse dos veces una subida de los tipos de interés, actualmente en el 1%, a finales de año al hilo de la incipiente recuperación que se espera para el conjunto de la economía europea con la excepción de algunos países, entre ellos España, cuya salida de la crisis está prevista para finales de 2010.

Como viene siendo habitual Holanda y Dinamarca son los dos países europeos con menores tasas de desempleo, un 3,4 y un 5,9% respectivamente, como consecuencia de tener unos mercados laborales más flexibles y una menor dependencia de la demanda interna derivada de una mayor competitividad.

En el lado opuesto, y detrás de España, los países europeos con mayor tasa de paro fueron Letonia, con un 17,4%, y Lituania, con un 16,7%.

España: récord de paro juvenil

En el caso de nuestro país, si tiene el triste récord de tener la mayor tasa media de paro, este «título» se hace extensible también a los trabajadores jóvenes, por debajo de 25 años, así como a las mujeres.

Así, según la oficina de estadísticas europea, Eurostat, el 38,4% de los jóvenes españoles menores de 25 años se encuentra en paro, frente a tan sólo el 19,7% de la medida de la Unión Europea, con lo que estamos otra vez cerca del doble de la media europea después de que en tan sólo un mes este indicador, en el caso de España, haya subido nada menos que un 0,9%, frente a un tímido avance de una décima en el caso de la media de la Unión Europea.

En cuanto a las trabajadores españolas la situación es más o menos similar ya que, con un 19% de desempleo, doblan la media europea, situada en el 9% en el caso de la Eurozona y en el 9,8% en el del conjunto de la UE.

En este contexto la Comisión Europea ultima sus previsiones intermedias macroeconómicas, que hará públicas a mediados de septiembre, y en las que podría anunciar el estancamiento de la caída de la actividad económica.