Jueves, 19-02-09
El PP votó ayer en contra de la enmienda a la totalidad presentada por Ciutadans contra el proyecto de ley del Síndic de Greuges, que amplía el ámbito de supervisión de este órganismo en cumplimiento del nuevo Estatut. Esta postura generó la indignación de algunos miembros del grupo parlamentario popular, quienes recuerdan que la regulación de la figura del Síndic que aparece en el texto estatutario fue recurrida por el PP y por el Defensor del Pueblo ante el Tribunal Constitucional (TC).
El Pleno del Parlamente dio luz verde a la tramitación de esta ley, después de que el tripartito -PSC, ERC e ICV-, CiU y PP votaran en contra de la enmienda presentada por Ciutadans, cuyo presidente, Albert Rivera, aseguró que el proyecto regula ámbitos que están recurridos ante el TC y criticó que se «cierre la puerta» a la intervención del Defensor del Pueblo limitando la competencia de actuación al Síndic.
«Ley positiva y necesaria»
Estas misma tesis es defendida por algunos diputados del PP, lo que puso en evidencia las discrepancias internas existentes actualmente en el grupo parlamentario popular. Por contra, el diputado Francesc Vendrell -que fue uno de los ponentes de la reforma estatutaria-, aseguró durante su intervención en el plenario que la ley «es positiva y necesaria», aunque anunció que el PP presentará enmiendas parciales para mejorar algunos aspectos.
Vendrell acusó a Ciutadans por «querer trasladar el debate sobre el Estatut en cada iniciativa parlamentaria» que se trata en la Cámara catalana. «No asusten a los ciudadanos diciendo que a partir de ahora no podrán recurrir al Defensor del Pueblo, porque esto no es verdad, y porque aquí venimos a hacer política y no demagogia barata», dijo el representante popular.

