Salsa Mornay. Receta deliciosa de una versión de la bechamel

Salsa Mornay. Receta deliciosa de una versión de la bechamel

Icono personas Para 6Icono euro 1€/pers.Icono calorias 246kcal/100g

Ingredientes

  • 250 ml. de leche entera
  • 25 g. de mantequilla
  • 25 g. de harina o almidón de maíz
  • 2 g. de pimienta negra recién molida
  • 2 g. de nuez moscada molida
  • 5 g. de sal fina
  • La yema de un huevo
  • 50 g. de queso rallado (recomendable el queso Parmesano, Cheddar o incluso ambos)
  • Para aromatizar la leche (opcional): ½ cebolla, ½ puerro, 1 rama de apio, 4 ramitas de perejil y 1 hoja de laurel
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Parecida a la salsa bechamel, pero con un añadido especial de queso rallado y yema de huevo, la salsa Mornay constituye una salsa ideal para acompañar pescados y mariscos, hortalizas e incluso para gratinados.

A pesar de que no se sabe mucho sobre esta salsa, se la asocia a un ilustrado francés llamado Philipe de Mornay nacido en 1549. La existencia de la salsa no fue documentada hasta el siglo XIX durante el reinado de Carlos X y es en Le Grand Véfour, una calle parisina, donde se presenta en la carta de un restaurante.

Y en función de la región en la que nos encontremos podemos elegir entre numerosos tipos de queso, entre los cuales se encuentran; el queso Gruyer, Emmental, Parmesano o Cheddar blanco. A continuación, te enseñamos la receta de esta maravillosa salsa.

La receta de hoy va con unas cantidades perfectas para preparar una salsa con un espesor medio que os puede servir para cualquier elaboración, un poco más o menos de almidón de maíz y tendrás el toque justo para tu receta, a tu gusto. ¡No te pierdas nuestro paso a paso y prepárala en casa!

Receta de la salsa Mornay

Preparación de la salsa bechamel, la base de la salsa Mornay

  1. Comenzamos preparando una buena base para la bechamel enriquecida que vamos a cocinar.
  2. Una opción es aromatizar la leche con la que vamos a preparar la salsa, es un paso opcional, pero que hace que nuestra salsa sea algo delicioso. Para ello ponemos en una cazuela la leche, la cebolla, el puerro, el apio, el perejil, la hojita de laurel, sal y ½ cucharadita de pimienta negra en grano. Calentamos hasta que comience a hervir la leche, apagamos el fuego y dejamos que repose tapando la cazuela durante unos 30 minutos.
  3. Colamos la leche y la volvemos a poner al fuego apartando 75 ml. para una taza. Mantendremos la leche caliente para utilizar en la bechamel.
  4. En una cazuela o sartén ancha, calentamos la mantequilla hasta que se derrita. Es importante que se remueva en todo momento porque no queremos que se funda. Si lo necesitas puedes retirarlo del fuego.
  5. Añadimos la harina y, sin parar de remover con unas varillas. Cocinamos la harina durante unos minutos, hasta que comience a dorarse. Incorporamos la leche poco a poco, en tandas de uno o dos cucharones. Aderezamos con la nuez moscada y una pizca pimienta y mezclaremos hasta que nos quede una salsa con una consistencia medianamente espesa.
  6. Tenemos que integrarla bien con las varillas antes de añadir más cantidad, en cada vez. Cuando ya tengamos toda la leche integrada tendremos una crema fina y sin grumos. Y ya tendremos la base de bechamel lista para hacer nuestra salsa Mornay.

Preparación de la salsa Mornay

  1. Al mismo tiempo que batimos el contenido de nuestro cazo agregaremos el queso rallado que hayamos elegido. Esperaremos removiendo siempre, hasta que se funda. Recuerda que los quesos escogidos tienen que poder fundirse.
  2. Seguiremos removiendo a fuego lento hasta que la consistencia de la salsa sea considerablemente untuosa. Debe ir espesando con la cocción pero en función de tus preferencias, puedes añadirle más o menos queso para que el espesor sea más o menos pronunciado.
  3. Seguidamente, retíralo del fuego cuando no haya rastro de grumos y deja que enfríe un poco. Cuando la salsa se haya templado, agrega la yema de huevo y remuévelo rápidamente porque puede que cuaje la bechamel con el queso.
  4. El último paso será poner a cocer la mezcla sin que la yema se solidifique. Ésta solo tendrá que ligarse con la bechamel hasta lograr una pasta homogénea. ¡Y ya habrás terminado! ¡Que aproveche!

Consejos y recetas que quedan genial con salsa Mornay

  • Son numerosas las opciones ya que se puede combinar casi con cualquier plato, ya sea para gratinar cualquier comida en el horno, para los platos de pasta y como ya se ha mencionado anteriormente para las carnes, los mariscos y pescados.
  • Si vamos a acompañar alguna receta de carne o pescado blanco es mejor una salsa poco espesa. En cambio para napar unos huevos escalfados o gratinar un plato de Mac and cheese, los famosos macarrones con queso a la americana la salsa deberá tener más cuerpo.
Hemos trabajado 2 horas y 20 minutos para que disfrutes esta receta. ¿Cómo se calcula?

30 min. cocinando, 30 min. para hacer y editar las fotos, 45 min. para redactar y 35 min. para organizar y publicar todo en la web y en redes sociales.
😊 Sin contar lo que dedicamos a investigar cómo hacer la mejor receta, comprar los ingredientes, comerla (y repetirla si no ha salido de rechupete), leer vuestros comentarios y responder a las dudas.

Ilustración

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Categorías: Recetas de salsas y guarniciones

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