El emergente peso político de Unión, Progreso y Democracia encontró freno inesperado en las elecciones autonómicas celebradas hoy en Andalucía. El partido liderado por Rosa Díez, que venía registrando un sostenido incremento de su apoyo electoral no alcanzó los resultados esperados y se quedará fuera del Parlamento andaluz. Donde sí ha conseguido un escaño ha sido en Asturias, donde la formación se ha convertido en la clave para otorgar el gobierno al Partido Socialista.
El candidato por Asturias, Ignacio Prendes, logró recabar los apoyos necesarios para alcanzar el escaño en Asturias y se convirtió en la clave para el PSOE, cuya suma de votos con la formación magenta e Izquierda Unida daría la llave de gobierno al candidato asturiano. UPyD ha obtenido en el Principado 18.351 votos.
Peor le ha ido a Martín de la Herrán en Andalucía, que con sus 124.771 votos, no alcanza la representación parlamentaria.
El partido magenta solo había concurrido a unas elecciones andaluzas, las de 2008. En aquella ocasión, la recién nacida formación sólo obtuvo 27.261 votos, que supusieron un pobre 0,61% del total de sufragios. El partido de Rosa Díez se presentó a aquellos comicios pocos meses después de su fundación, y le faltaba rodaje.
Desde 2008
En pocos años, UPyD, un partido que nació promovido por la ex socialista Rosa Díez, el ex presidente de Foro de Ermua Mikel Buesa y los filósofos Carlos Martínez Gorriarán y Fernando Savater, se ha convertido en un referente político contra la bipolaridad de los parlamentos de España. Su líder, Rosa Díez consiguió el escaño nacional por Madrid en las elecciones generales de 2008. En las siguientes, las del pasado 20 de noviembre, la marea magenta quintuplicaría sus diputados en la cámara baja. UPyD ha ido acumulando creciente protagonismo político y peso institucional. Por primera vez, desde su impetuosa irrupción en la política nacional se frena su escalada electoral.




