Hace justo un mes que una brutal agresión de Edu Albácar dejó a Charles fuera de servicio por una doble fractura de mandíbula de la que tuvo que ser intervenido para reparar los daños causados por un codazo inadmisible. El lateral izquierdo, que fue sancionado sólo con cuatro partidos al considerar el Comité de Competición que no hubo «agresión» sino una «conducta violenta», podrá jugar ya este fin de semana. Al brasileño aún le quedan algunas semanas más para volver a los terrenos de juego. Se habían previsto entre cuatro y cinco semanas de baja, pero ya va por cuatro y aún le queda tiempo por delante para poder jugar de nuevo.
Pero, por fin hay buenas noticias sobre su lesión. El cirujano maxilofacial que dirigió su intervención quirúrgica y que lleva su recuperación, Julián Rodas, le quitó ayer las gomas de sujeción que le impedían masticar y, por tanto, comer. Hasta ahora, el brasileño ha pasado un mes alimentándose con batidos energéticos. Los resultados, evidentemente, no son los mismos que la alimentación sólida tradicional. De hecho, el futbolista ha perdido entre 6 y 7 kilos en este plazo de tiempo.
Charles comenzó ayer a ver la luz al final del túnel. El futbolista comenzará a comer con una dieta blanda, que poco a poco irá aumentado hasta conseguir una alimentación totalmente normal. Ahora, que recupere el peso perdido es una prioridad para que también recupere la forma física y esté a disposición del entrenador.
El delantero del Córdoba no ha perdido ni un segundo en su intención de regresar lo antes posible a los terrenos de juego. De hecho, ayer se marchó de la revisión clínica al estadio para comenzar a ejercitarse. El brasileño saltó por primera vez desde su lesión al césped para trabajar. Charles lo hizo, lógicamente, en solitario y apartado del grupo. El atacante pudo dar las primeras carreras al trote en El Arcángel. Un gran noticia.
Incluso, el jugador es optimista y piensa que la próxima semana ya podría, al menos, incorporarse al trabajo con el grupo, paso previo e imprescindible para su regreso a la competición oficial.
El propio Charles, a través de la red social twitter, explicó que ayer que «ya me quitaron las gomas de la boca. Ahora, a comer y ganar peso. La semana que viene con el grupo ya». El regreso del brasileño, que sólo ha jugado media hora en 2012, se antoja decisivo para afrontar el tramo final de la Liga con plenas garantías de seguir luchando por la promoción de ascenso, un objetivo que depende del equipo a pesar de la larga ausencia de uno de los jugadores claves de la plantilla blanquiverde.
La otra buena nueva de la sesión fue ver también a Cerra realizar sus primeras sesiones de carretera continua para iniciar la fase final de su recuperación del esguince de tobillo que le ha tenido apartado del equipo durante el último mes. El lateral derecho trotó ayer junto Charles.
Cristian García y Astrain continúan su recuperación de una rotura de ligamentos. El lateral ya está integrado en casi todos los entrenamientos del equipo y en dos o tres semanas podría conseguir el alta médica.
La otra cara de la moneda la pusieron Javi Hervás, Prieto y Airam. Ninguno de los tres pudo completar la sesión de entrenamiento. Se retiraron en la fase final, cuando la plantilla realizó un partido. Como cada primer entrenamiento de la semana, simplemente se trató de una retirada por precaución y para completar un trabajo individualizado. Su participación ante el Xerez está asegurada.
Fuentes y Caballero no podrán jugar. Ayer fueron sancionados. También Esaú Sánchez, preparador físico, quien ha sido castigado con dos partidos. Taira, Fede, Quero o un cambio de sistema, con Patiño y Airam arriba, son las opciones para suplir a Caballero. En principio, Ximo jugará por Fuentes, aunque Jémez también probó ayer a Dubarbier en el lateral.
