Holanda ya es favorita. Ha pasado de ser una selección defenestrada, perdida, a la deriva bajo el mando de un entrenador que se va a ser una clara candidata al título. Solo necesitó 90 minutos. Ofreció espectáculo, del bueno, ante la campeona del mundo, ante la selección que solo por nombre ya estaba en la final en todas las quinielas. Holanda demostró que hacía falta más que eso y hoy busca ante Australia certificar su pase como primera de grupo. [Australia-Holanda en directo, a las 18.00]
La «Oranje» llega crecida. Ni ellos mismos esperaban la goleada que le endosaron a España en la primera jornada y quiere reforzar la imagen que ofrecieron. Van Gaal no quiere que haya ningún cambio en el equipo, ni en la mentalidad ni en el juego, así que optará por alinear el mismo once que salió triunfante ante España. Van Persie volverá a ser la referencia en ataque y Robben intentará tirar de la velocidad con la que volvió absolutamente loca a la defensa española.
También sufrió la zaga australiana con Alexis Sánchez delante. El delantero del Barcelona causó estragos a unos centrales que temen la llegada de Van Persie. De todas formas, ya saben lo que es defender al jugador del Manchester United en otras ocasiones y le ganaron la partida. Holanda ha jugado contra Australia en tres ocasiones y en ninguna se llevó la victoria. Son malos precedentes pero el optimismo que reina en el vestuario holandés los contrarresta.
En Holanda reside la euforia. Los jugadores lo saben y por eso salió Robben a rebajar el entusiasmo. «Hay que mantener los pies en el suelo», aseguró el delantero del Bayern. Sabe que solo un exceso de confianza les puede mermar ante una Australia que viene de perder con Chile. Los «aussies» son conscientes de la dificultad del grupo en el que cayeron, pero quieren dar la sorpresa y se aferran a Cahill, que ya apareció ante los chilenos.






