Es la primera vez que el agotamiento del ozono, un fenómeno atmosférico superior limitado a las regiones polares, se relaciona con el cambio climático desde el polo al ecuador
El agujero de la capa de ozono afecta al cambio climático y a la circulación de corrientes en el Hemisferio Sur, según el estudio «Impacto del agotamiento del ozono polar en Subtropical lluvia» realizado por investigadores de la Universidad de Columbia de Ingeniería y Ciencias Aplicadas y publicado en la revista Science.
El informe muestra cómo el agujero de la capa de ozono, que se encuentra sobre el Polo Sur, ha afectado a toda la circulación del Hemisferio Sur, llegando hasta el Ecuador. Además, pone de manifiesto que el agujero de la capa de ozono «está cambiando el flujo de la atmósfera en las latitudes altas». Así, afirma que «el agujero de la capa de ozono es capaz de influir en la circulación tropical y las lluvias aumentan en las latitudes bajas en el hemisferio sur». Es la primera vez que el agotamiento del ozono, un fenómeno atmosférico superior limitado a las regiones polares, se relaciona con el cambio climático desde el polo al ecuador.
Efecto dominó
El profesor de Matemática Aplicada y Ciencias de la Tierra y del Medio Ambiente, científico de investigación en el Observatorio Terrestre Lamont-Doherty, y co-autor del estudio, Lorenzo M. Polvani, ha apuntado que el agujero de ozono ni siquiera se menciona en el resumen para los responsables políticos emitidos con el último informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC). Polvani ha recordado que mientras que el agujero se ha considerado siempre como un problema resuelto, ahora se ha evidenciado que «ha causado una gran parte del cambio climático». Por ello, ha advertido: «A pesar de que la capa de ozono se recuperará en los próximos decenios, el cierre del agujero de ozono tendrá un impacto considerable sobre el clima».
La doctora de Investigación Científica en Columbia Ingeniería del Departamento de Física Aplicada y Matemática Aplicada y autora principal del artículo, Sarah Kang, ha destacado lo asombroso que es que el agujero de ozono, que se encuentra tan alto en la atmósfera sobre la Antártida, pueda tener un impacto en los trópicos y afectar a las precipitaciones. A su juicio, es «como un efecto dominó».


