La presión internacional crece sobre el gobierno sirio, a medida que aumenta el número de víctimas mortales por la represión que está llevando a cabo para acallar las protestas. El secretario de la ONU, Ban Ki Moon, ha hablado por teléfono con el presidente sirio, Basar Al Assad, que ha asegurado que las operaciones militares contra los opositores han terminado. Como muestra el gobierno sirio ha difundido unas imágenes en las que se ve a los tanques abandonando la ciudad de Latakia tras cuatro días de asedio, que han terminado con un centenar de heridos y decenas de muertos. Los 15 miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se reúnen hoy para abordar la problemática siria. EEUU por su parte está dispuesto a pedir ya la dimisión de Asad, tras cinco meses de represión en los que han muerto 2.000 personas.



