Un equipo de científicos canadienses asegura que los grandes simios utilizan la mímica para comunicarse con otros.

Los orangutanes son capaces de decirles a otros que están heridos o que quieren un coco con gestos
Los orangutanes recurren a la mímica para comunicarse. Un equipo de científicos canadienses asegura que los grandes simios usan «elaborados gestos» para lanzar mensajes a otros, recoge la BBC. Por ejemplo, un orangután que toma una rama de palmera para simular abrir un coco con la esperanza de que su acompañante humano utilice su navaja para llevar a cabo la acción. O el ejemplar que muestra su intención de «asaltar» un termitero arañándose y rascándose la piel para combatir un picor.
Los expertos investigan desde hace veinte años a un grupo de orangutanes de Borneo que fue capturado y puesto en libertad en un bosque controlado.
Anne Russon, catedrática del Glendon College de la Universidad de York, en Ontario, asegura que el comportamiento «inusual» de estos animales les sorprendió: «Parecía sacado de un personaje de ficción, completamente estrambótico».
Comparten información
Kikan se había herido en un pie. Los cuidadores le curaron con el líquido de una rama de higuera que habían desenterrado con una pequeña roca. Días después, la hembra reclamaba la atención de los biólogos cogiendo una hoja del mismo árbol y aplicándosela sobre la extremidad accidentada. «Los simios comparten información con aquellos que les han ayudado con anterioridad. Y aunque no sepan con exactitud cómo les han brindado su apoyo, los imitan», asegura Russon.
El caso de Cindy tiene como protagonista a un paraguas. La orangután espió cómo empleaba el artilugio uno de los conservacionistas y le solicitó uno igual con la mano abierta. Al ver que sus requerimientos no eran atendidos, decidió ponerse una rama sobre la cabeza, ofrecérselo al hombre y confiar en que éste le diera su paraguas en compensación.
Los gorilas y chimpancés también actúan
La «pantomima» forma parte del lenguaje natural de los orangutanes, cuyas habilidades comunicativas son más sofisticadas de lo que se piensa. «Ellos pueden construir enunciados del tipo "Quiero realizar la acción X con la herramienta Y para conseguir el objetivo Z"», explica Russon.
Ya se habían constado este tipo de sutilezas en otros simios: Koko, una gorila entrenada para «hablar» y que manipulaba de forma imaginaria un balón entre sus manos para expresar palabras como «plastilina» o «arcilla». O el de una mamá chimpacé que le explicaba a su hija cómo partir una nuez con una piedra.
