Tras la Segunda Guerra Mundial, muchos artistas quisieron empezar de cero y por eso propusieron una ruptura con la pintura tradicional y comenzaron a expresar este sentimiento con ataques violentos contra la pintura y contra la superficie de la propia tela. Pollock dejaba gotear la pintura, Shimamoto cargaba cañones con pintura y los disparaba contra el lienzo, de este modo, los artistas rechazaban controlar el resultado final de su obra y el énfasis recae tanto en el proceso creativo como en la obra resultante. La exposición “¡Explosión! El legado de Jackson Pollock”, que abrirá al público este miércoles en la Fundación Joan Miró de Barcelona hasta el 24 de febrero, con el patrocinio de la Fundación BBVA, incluye elementos performativos y conceptuales de la pintura a través de las obras de 35 artistas (Jackson Pollock, Allan Kaprow, Yves Klein, Hans Namuth, Yoko Ono, Shimamoto o Andy Warhol). Hay pinturas, fotografías, vídeos, performances, danzas, audios e instrucciones. También incluye filmaciones de Pollock trabajando, Yves Klein y el grupo Gutai pintando de manera performativa, unas imágenes que provocaron gran controversia artística.