La chica de Nueva York

Wren es una chica que ha nacido en el lado incorrecto del río Hudson y que decido mudarse a Manhattan en busca de su lugar en el Sol. Instalada en el bohemio barrio de Greenwich Village y equpida con poco más que su natural talento para la autopromoción, la joven rechazará las atenciones de un sensible pintor para intentar cazar a algún músico famoso, en un intento de conseguir ella también la fama y la fortuna.

La primera película de la directora Susan Seidelman ("Buscando a Susan desesperadamente") fue esta vieja historia de la muchacha perdida en la gran ciudad, pero contada con renovada energía y entusiasmo. La cineasta demostró tener un sentido especial para mostrar el glamour de la decadencia urbana, utilizando un montaje rápido y estilizado y una potente banda sonora.