Desde los tiempos en que César Augusto fundó hace dos milenios lo que hoy conocemos como Zaragoza, el río Ebro y el aprovechamiento del agua en general han formado parte de la esencia vital de la ciudad y de su historia.

No es extraño, pues, que sea precisamente el líquido elemento el objeto del lema escogido para la muestra internacional que abrirá sus puertas justo dentro de dos años en la capital aragonesa.
Todo en la Expo 2008 estará, de una u otra forma, vinculado al tema del «Agua y desarrollo sostenible», desde los distintos pabellones hasta los espacios temáticos y los contenidos que ofrezca cada país y cada Comunidad, pero también, incluso, los espectáculos que se programen a lo largo de los tres meses del evento.
Es más, la propia ubicación del recinto expositivo, en el Meandro de Ranillas, está situado a orillas del río Ebro, que de esta manera recobrará un protagonismo especial. Y no sólo durante la Expo, sino que las administraciones están acometiendo ya un ambicioso proyecto de recuperación integral de sus riberas y se está construyendo un azud que permitirá crear una lámina estable que haga navegable el tramo urbano del río.

Más allá de aspectos locales, Zaragoza 2008 será un escaparate mundial del debate entorno al agua en múltiples facetas. En el pabellón-puente —una de las joyas arquitectónicas de la Expo— se abordará el agua «como recurso escaso», para lo que habrá contenidos sobre los usos del agua (para la agricultura, la industria, la energía, el consumo humano, el ocio o como vía de transporte), la prevención y seguridad y las buenas prácticas en los hábitos de consumo.
La Torre del Agua expondrá las novedades científicas para que el agua satisfaga las necesidades humanas, así como los problemas para la disponibilidad del recurso y su aplicación al ocio, la salud, las culturas o el arte.

Relación entre pueblos
«Los paisajes del agua» será el objeto del Acuario, donde se observará este recurso como creador de paisajes naturales y su relación con la ordenación territorial. El agua, además, es «elemento de relación entre los pueblos», de manera que la mayoría de los países comparte sus recursos hídricos con los vecinos, como también se pondrá de manifiesto en la exposición.
A ellos se sumarán los numerosos foros y conferencias, con participación de los principales expertos internacionales, en torno al agua. El objetivo de Zaragoza de convertirse en capital mundial del agua ha comenzado a cumplirse, puesto que la ONU la ha designado sede del Secretariado para la Década del Agua (2005-2015).