Juan Marín: «Yo puedo pactar con casi todo el mundo»

«El Gobierno andaluz es un contrapeso al Gobierno de Sánchez porque cree en la igualdad de los españoles»El segundo cumpleaños del Gobierno andaluz «del cambio» pilla al vicepresidente en medio de dos crisis, la pandémica y la que procura cierto sector de Ciudadanos que demanda mayor protagonismo de las siglas en la acción de un Gobierno sin mayoría absoluta y bipartito cuyo mayor secreto es haber evitado escenificar en todo este tiempo tensiones internas. ¿Es usted de los que mira a Andalucía y piensa: «Qué Gobierno se está perdiendo España?»El Gobierno de Andalucía está siendo un contrapeso muy importante al Gobierno de la nación. El gran reto de Juanma (Moreno) y mío era demostrar que un gobierno de coalición podía funcionar y que además se convirtiera en un solo gobierno. Sánchez e Iglesias no mandan en España, mandan Otegui y Rufián. Se han olvidado de que todo el mundo abogaba por un cambio de la ley electoral, por un pacto por la educación y un modelo de financiación basado en la igualdad de todos los españoles. Estoy convencido de que Juanma piensa igual que yo. Nosotros apostamos por esa igualdad real. Somos una amenaza para el Gobierno de este país por demostrar que funciona un gobierno de coalición del PP y Cs y porque estamos demostrando que realmente después de 37 años de socialismo los andaluces se están olvidando de muchos de los problemas que tenían.¿El consenso y la lealtad siguen siendo las grandes bazas del cambio?Totalmente, no hay un paso que demos que no lo hablemos antes, respetando los principios y valores de las dos formaciones políticas.¿Y la lealtad, como dicen del amor, también se rompe de tanto usarla?No. Hay algo fundamental: el 2 de diciembre de 2018 hubo un mandato de los andaluces. Cuando me llamó Juanma a la una y media de la madrugada y me dice: «Juan, los andaluces nos han dado un mandato, tenemos que sentarnos, acatarlo y trabajar juntos», lo hicimos con total honestidad, sinceridad y humildad. La lealtad ha sido absoluta y va a seguir siendo así esta legislatura, que se terminará en su fecha, cumpliendo con los objetivos que nos hemos marcado. La pandemia nos va a retrasar o impedir algunos proyectos pero será un problema de tiempo no de voluntad.«No me preocupan las encuestas; me preocuparán en 2022»Permítame una licencia becqueriana, en el año del poeta: ¿Cada vez que la Junta publica su Barómetro siente «el frío de una hoja de acero en las entrañas»?En absoluto. No me preocupan las encuestas; me preocuparán en 2022. Yo lo que veo en las encuestas es que los andaluces están satisfechos con nuestro trabajo. Mi futuro, por supuesto, ni me preocupa. El cortoplacismo sólo puede llevarte al fracaso electoral. Cs ha pasado un momento muy difícil. Ahora, cuando salen los sondeos, no se acuerdan de que el 10 de noviembre de 2019 la intención de voto era de un 8,1%, un año después es de un 12,2 de media. Cuando nos presentamos en 2018 teníamos una intención de voto del 12 por cierto y obtuvimos 21 escaños. No firmaría hoy repetir ese resultado electoral después del desgaste de una legislatura. Me encanta que durante cinco o seis años los andaluces piensen que soy el segundo político más valorado. A mí me aprobaban los profesores en el colegio con un 4,7.El mismo equipo La última oleada del Barómetro apunta que hay tantos andaluces que aprueban como suspenden al Gobierno andaluz y que tres consejeros de Ciudadanos son los menos conocidos y peor valorados. ¿Es necesario un cambio de ciclo en el Gobierno o en Ciudadanos?Yo creo que tiene que terminar el mismo equipo que comenzó este proyecto. Hay políticas en marcha que no recomiendan un relevo. Lo que sí reconozco es que fue un error reducir tanto la estructura de la Junta a nivel provincial. Ahí sí hay que hacer cambios. No podemos tener una sola jefatura para 17 servicios de Educación, Medio Ambiente o Infraestructura. Pusimos en marcha la figura de los coordinadores pero hay mucho por hacer, sobre todo ahora, que con la pandemia, hay acumulados miles de expedientes. Considero, como otros consejeros, que hay que ampliar la estructura, a coste cero, por eso abogamos por incorporar a personal que ya tenemos en la estructura de la Junta para realizar esas funciones.Juan Marín con Rocío Ruiz - Vanessa GómezLa consejera Rocío Ruiz ha comentado, en contra de un acuerdo de Consejo de Gobierno, que prefiere afiliados de Ciudadanos que a funcionarios al frente de esas delegaciones territoriales. ¿Eso de enchufar a los militantes no era una cosa de la vieja política? ¿Debería dimitir si no comparte el acuerdo?La evidencia de que en Ciudadanos no actuamos así es que de nuestros cinco consejeros solo yo era afiliado al partido cuando entramos en el Gobierno. Ya dije que va en direción contraria a lo que ha dicho siempre Ciudadanos y añado que los acuerdos del Consejo de Gobierno siempre se cumplen.Ha dicho usted que esta legislatura se agotará. ¿No le preocupa que las urgencias electorales de su partido puedan apuntar a otro rumbo y propiciar una ruptura del Gobierno andaluz?No. Yo creo que mi partido está centrado en las catalanas de febrero. Venimos de ganar allí las elecciones, cuando Inés fue candidata, aunque ahora el escenario es muy diferente. Tenemos que ser esa frontera para la defensa de la unidad de España y el constitucionalismo en Cataluña y ahí tenemos que centrarnos y unirnos todo los que podamos. Y2021 será un año de desarrollo de todas las políticas que hemos puesto en marcha. Será un año de crecimiento económico que se confirmará en 2022 para volver a niveles de 2019. No creo que a nadie se le ocurra en un momento como ese, por un interés partidista, plantear ninguna convocatoria electoral. Si lo hay no estaré de acuerdo."Nuestro posicionamiento siempre ha sido el mismo, estar entre el PSOE y el PP. Yo puedo llegar a acuerdos con casi todo el mundo" Según los sondeos, el ofrecimiento de Arrimadas a Sánchez para apoyar sus presupuestos parece rentable en términos electorales ¿No cree necesario girar a la izquierda para pescar votos en el caladero del socialdemócrata descontento con el sanchismo?En el último sondeo de Andalucía resulta que el crecimiento de Ciudadanos es a cuenta de votantes del PSOE y del PP. Eso nos sitúa donde queremos estar. Esa es nuestra posición en Andalucía. A nivel nacional creo que Inés ha llevado adelante una estrategia muy valiente y necesaria. Nosotros siempre hemos sido un partido que ofrece diálogo, que intenta buscar acuerdos. Ahora todos los españoles han visto que Sánchez ha elegido, que tenía opciones y ha optado por una. No me extraña que haya un electorado socialdemócrata y socialista al que no le guste esta alianza, pero Sánchez ha diseñado de forma muy práctica su estrategia. Sabe que va a haber elecciones probablemente en 2023, ha marcado su estrategia tras aprobar los presupuestos que van a ser los de su legislatura. En ese escenario es donde tenemos que marcar la estrategia y nuestro posicionamiento siempre ha sido el mismo, estar entre el PSOE y el PP. El sentido común está en el centro y a la gran mayoría de los españoles les gustaría que hubiera un partido de centro fuerte de una una vez por todas en este país capaz de meter en razón a los que de vez en cuando se van a un lado o a otro. Yo puedo llegar a acuerdos con casi todo el mundo, casi. ¿Entre los políticos a los que no ofrecerá acuerdos está Susana Díaz?Claro, porque me ha engañado. Y a mí me engañan una vez no más. Nunca he menospreciado a nadie y creo que la señora Díaz lo hizo con un grupo parlamentario leal, fiel, que cumplió al cien por cien y del que al final se rió. Esa risa le salió cara, hizo mal los cálculos y al final los andaluces la pusieron en la oposición, no yo, los andaluces. ¿Con Juan Espadas sí?Claro, nos hemos sentado a hablar de los presupuestos municipales. Nos hizo una propuesta, presentamos otra y lo hemos sacado adelante.¿Puede suponer ese elogio a Juan Espadas una plataforma de apoyo en su promoción como futuro secretario general de PSOEandaluz?Yo siempre le he escuchado decir que su sitio está en el Ayuntamiento de Sevilla. No va más allá de mi reconocimiento personal. Creo que Juan Espadas es un tío con el que se puede hablar y me parece un hombre bastante razonable, con el que se puede negociar, como lo he hecho con Julio Millán o Gabriel Cruz, o Paco Reyes. Y nadie pone en duda que sean socialistas.Dicen de Espadas que es moderado ¿pero eso de ser moderado y sanchista, no es un oxímoron?Yo creo que ellos tienen sus corrientes. Tienen un problema que es que después de tener durante 37 años el gobierno de Andalucía nadie asumió políticamente esa pérdida. Cuando nosotros bajamos en 2019, Albert se fue. Mayor ejemplo de responsabilidad política no ha habido en este país. Entonces algo pasa en el PSOE, es evidente, y esa tensión interior la vemos cada día cuando endurece cada vez más su posición.Coalición electoral con el PP ¿Eso que dijo durante un desayuno con Albert Rivera en Málaga de que cabe una posibilidad de ir en coalición con el PP en Andalucía en 2022, lo mantiene?La coalición existe en este momento. Otra cosa es la interpretación que se hizo de unas declaraciones mías en un acto con Albert en Málaga. Pero yo digo: ¿cómo dos años antes de unas elecciones alguien puede descartar una opción de coalición en un gobierno, ni con el PSOE, ni con el PP, ni con Vox ni con nadie. Hay elementos con los que evidentemente no entraría en un gobierno de coalición. Tampoco significa ir a las elecciones con un «Andalucía suma». Yo no dije eso. Las interpretaciones son libres. Yo sigo manteniendo que si a este Gobierno y a los andaluces les va bien, llegadas las elecciones somos dos partidos distintos que podemos llegar a un acuerdo. Lo mismo puede ocurrir entre el PP y Vox, entre el PSOE y Adelante o entre cualquier formación política que se quisiera sumar. Si se ha demostrado algo en este país en este momento es que las coaliciones funcionan porque ya no va a haber mayorías absolutas. Hay que buscar lo que nos une más que lo que nos separa.Marín coincidió con Albert Rivera la semana pasada en Málaga - E.P.¿Puede que con tanto vaivén lo del centro liberal suene al electorado a intercambio de parejas más que a una opción política con principios?Somos un partido con unas ideas muy definidas. Siempre nos hemos encontrado a gusto en un espacio definido que permite que la gente trabaje en igualdad de condiciones. Hemos creído siempre que las bajadas fiscales generan más empleo y recursos para la administración pública; que ayudar al emprendedor, al autónomo, a la empresa es lo que genera riqueza en un territorio. No existe empleo sin empresas, desde las pequeñas a las multinacionales. En Andalucía tenemos muy pocas grandes empresas y eso es un error. Hay que apostar para que inviertan en Andalucía porque generan estabilidad, seguridad y riqueza. Otras cosa son las subvenciones. No se trata de crear grandes empresas sino de atraer a grandes empresas, que la administración no sea un lastre para sus proyectos. Las grandes empresas no vienen pidiendo subvenciones, vienen pidiendo que les dejen trabajar. Este es el modelo que defendemos. Si además somos capaces de hacer lo que no hizo ningún gobierno del PSOE, ni el que compartió con IU, de destinar un 7 por ciento del PIB a la Sanidad y el 5 a Educación, y esto se consigue con un pacto de PP y Cs ,apoyado por Vox, con la mayor inversión pública de hace décadas... Ese es el modelo en el que yo creo.Insisto. ¿ Por qué, ese permanente ofrecimiento les hace parecer ante el electorado los marxista de Groucho?Estar en el centro es muy difícil. Complicadísimo. Es fácil ser del Madrid o del Barcelona. Lo difícil es tener esa capacidad de dialogar y poner en práctica lo que se predica. Esa es la grandeza y la dificultad de nuestra posición, tener la capacidad de poder ofrecer un pacto a izquierda o derecha. Cuando se ha hablado tanto del ofrecimiento de Arrimadas a Sánchez para evitar la radicalización del Gobierno nadie repara que eso ya pasó en Andalucía. Si nosotros no hubiéramos apoyado a Susana Díaz en 2015 la única puerta que le quedaba era pactar con Podemos. Aquí no hubo un gobierno del PSOE y Podemos porque Ciudadanos se metió por medio. Cuando me preguntan si entiendo lo que está haciendo Inés Arrimadas siempre respondo que yo hice lo mismo.Juan Marín con Albert Rivera en Basrcelona - EFELos críticos ¿Eso de desayunar con Albert Rivera, a tenor de las críticas internas que recibió, se ha convertido en una actividad de alto riesgo en Ciudadanos?(Risas). Yo estoy en este proyecto por Albert Rivera. Siempre lo he dicho. Quién me dio la confianza, me pidió que le ayudara y confió en mí fue Albert. Me sumé a un proyecto político desde una plataforma provincial en la que estaba muy a gusto. Mi amistad con Albert es inquebrantable y yo no le tengo que pedir permiso a nadie para ir a desayunar, a comer y a cenar con Albert. Es mi amigo.Dedique un frase a sus críticos en el partido¿Tengo críticos? (risas) Yo creí que tenía compañeros.Y a los andaluces.Lo único que espero es no defraudarlos y que cuando termine esta Legislatura hayamos conseguido hacerlos más felices. Es mi objetivo. Y ahora prudencia y respeto ante el complicado momento. Ahora lo único que nos preocupa a mí y a Juanma es esto.

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El vicepresidente de la Junta asegura que la lealtad absoluta del Ejecutivo andaluz garantiza la Legislatura al completo

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