Un adulto entró en la madriguera de un pollo que se encontraba solo para agredirle hasta en seis ocasiones en la cabeza. La cámara oculta de una reserva escocesa destapó el mal comportamiento.
Los frailecillos son tan abundantes en Islandia que se permite su captura en determinada época del año
«Bullying» entre los frailecillos. Una cámara oculta de la reserva escocesa Sumburgh Head ha captado el mal comportamiento de un adulto con una cría. El agresor, al que han bautizado ASBO (siglas que en inglés significan «conducta antisocial»), aprovechó que los padres del joven no estaban en casa para colarse dentro. Cuando éstos llegaron, se asustaron «muchísimo» al ver a su hijo «medio muerto», aseguran los responsables del centro.
El 15 de junio, ornitólogos de todo el mundo disfrutaban de las imagenes facilitadas por el parque de un huevo en plena encubación. Poco después, eclosionaría el polluelo que fue víctima del brutal ataque. Hasta en seis ocasiones ASBO entró en su madriguera para golpearle la cabeza.
«Recibimos un gran número de llamadas de gente que presenció el hecho en directo, muy preocupada porque la acción no cesaba: duró más de cinco minutos», comenta Helen Moncrieff, encargada de la reserva, a una cadena de televisión escocesa.
El polluelo se recupera poco a poco. Su plumón es aún visible y parece que su dieta es pobre en agujas marinas, pero los cuidadores esperan verle abandonar el nido pronto.
Se desconoce qué motivó a ASBO a proceder de una forma tan violenta. Las especies de pájaros que crían en madrigueras en el suelo acaban por convertirlo en una gran guardería donde se sobreentiende que todos cuidan de todos. Pero a veces hay pollos que son abandonados. ASBO pudo ser uno de ellos y por eso pudo tomarla con la cría. «Al verla sola se sintió identificado y no le gustó, piensan algunos», dice Moncrieff.
El frailecillo, apodado «payaso de los océanos» por los colores vivos de su pico, mide unos treinta centímetros y vuela y se zambulle por las costas e islas del Atlántico norte y el Océano Ártico. Su curioso aspecto es similar al que luce el sanguinario malo de la saga fílmica Saw. A lo mejor ASBO es muy cinéfilo.