Tiempo de preparación: +12 horas para cuatro personas
PREPARACIÓN
Remoja la gelatina en agua fría unos minutos y escúrrela apretando bien para que pierda toda la humedad. Ralla los cítricos sin llegar a la parte blanca. Coloca la leche en un cazo y añade el anís estrellado y la vainilla partida en dos y, rascados sus granos, incorpora la ralladura. Arrima a fuego muy suave, incorpora la nata y el azúcar. En cuanto asome el primer hervor, deja que hierva 2 minutos muy suavemente y apaga el fuego. Tapa la cazuela con un plato y deja que la mezcla repose 10 minutos para que desarrolle bien los aromas. Ahora tenemos dos opciones: colar la mezcla y añadir la gelatina remojada para que se deshaga si queremos un postre más fino o pescar solo las vainas de vainilla y el anís estrellado, dejando la ralladura e incorporando la gelatina, si queremos que quede más rústico. En cuanto esté disuelta la gelatina, vierte la mezcla en pequeños tarros transparentes e individuales de cristal y deja que cuaje en la nevera al menos 12 horas.
ACABADO Y PRESENTACIÓN
Saca los tarros con la panna cotta de la nevera 20 minutos antes de comerla para que la textura del postre sea más temblorosa y pierda frío.
Podemos acompañarlas con una buena mermelada, compota o frutas de temporada troceadas (frutas rojas, caqui, rodajas de plátano, gajos de mandarina, fruta confitada...).