Situadas pocos kilómetros mar adentro, frente a las costas de Palamós, en Girona, las Illas Formigas son un enclave idílico, pero también son unos de los mayores centros de ocio de España. Se practica submarinismo y pesca deportiva. El Ministerio de Medio Ambiente quiere crear una reserva marina pero los que trabajan en las actividades de ocio ven peligrar su forma de vida. La propuesta tiene a favor a ecologistas y pescadores locales, que serían los únicos que podrían seguir pescando libremente en esta aguas. Las entidades que agrupan a los sectores náuticos y actividades submarinas han puesto el grito en el cielo y piden que se paralice el proyecto del Ministerio. Aseguran que aportan más beneficio a la zona que los pescadores a los que acusan de destrozar el fondo marino con la pesca de arrastre. Estas pequeñas islas fueron escenario en el siglo XIII del intento de invasión francesa a Cataluña. Ahora vuelven a ser protagonistas de otra contienda. Esta vez con su riqueza natural como objetivo.