El primer ministro chino Wen Jiabao aterriza en Arabia Saudí preocupado. Su país necesita más y más petróleo y uno de sus principales proveedores, Irán, está teniendo problemas. Su polémico programa nuclear hace que occidente boicotee sus exportaciones de crudo. Ante eso, Jiabao no ha tenido más remedio que lanzarse a una gira por el Golfo Pérsico. La primera parada es en su proveedor número uno, Arabia Saudí. El gobierno chino quiere asegurarse de que esa fuente de petróleo no le va a fallar. Después de cerrar ese trato, Jiabao seguirá con el tour, y visitará Qatar y Emiratos Árabes Unidos.