Hoy nos metemos en una clase de religión en Primero de bachillerato. Una asignatura considerada como una 'maría' de siempre pero que este año gana peso específico en el currículo: será evaluable y contará para la nota media. Un deseo de siempre de los obispos, recogido esta vez en la LOMCE. Un 150 por ciento más de alumnos se han matriculado en esta asignatura este curso. En bachillerato, la religión no tiene una alternativa en sí misma como en primaria o la ESO sino que entra dentro de un bloque de materias "específicas". El alumno ha de escoger tres o cuatro, entre ellas, segunda lengua extranjera, tecnología industrial, análisis musical, cultura científica o dibujo técnico. -Redacción-