La cabra nos proporciona leche y alimento, pero nunca la habíamos visto como salvaguarda del patrimonio artístico. Nunca hasta ahora. En la comarca catalana del Penedés un grupo de cabras está siendo utilizado para limpiar la maleza de un castillo, el de Subirats, que data del año 917. Además la cabra se está utilizando como reclamo turístico ya que, además del tour por el castillo enseñan a los visitantes algunas costumbres de estos animales.