Los bocadillos más tradicionales y sabrosos de España
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Los bocadillos más tradicionales y sabrosos de España

Una forma sencilla e inimitable de comer bien. He aquí diez formas de prepararlos para chuparse los dedos

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Una forma sencilla e inimitable de comer bien. He aquí diez formas de prepararlos para chuparse los dedos

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  1. De tortilla de patata

    pablo b

    Pocas cosas más sencillas de preparar y de comer que un bocadillo. Una barra de pan abierta por la mitad y dentro de ella lo que se quiera. Todo cabe, desde el producto más sofisticado hasta el más sencillo. Perfecto para llevar sin problemas a cualquier sitio, ya sea una excursión, un partido de fútbol o una corrida de toros, o para comer en cualquier bar del camino sin complicarse demasiado la vida y siempre con la ventaja de no necesitar platos ni cubiertos. No es un invento español porque sus orígenes se remontan en el tiempo, pero si es cierto que en España hemos hecho bandera del bocadillo. Al fin y al cabo aquí nos gusta comer de manera informal y no cabe duda de que junto a las tapas, incluso más que estas, los bocadillos son la máxima expresión de esa informalidad. La clave está en elegir un buen pan y en la calidad de lo que se pone dentro. Como dice el sociólogo Lorenzo Díaz, "en España no se puede explicar la vida sin un bocadillo".

    Aunque se pueden hacer de cualquier cosa, incluso con la máxima sofisticación en los ingredientes, frente a la nueva tendencia de los bocadillos «gourmet» los preferidos de los españoles siguen siendo los más tradicionales. Y entre todos ellos estos diez que hemos seleccionado.

    De tortilla de patata

    Hidratos con hidratos, pero pocas cosas más ricas que un bocadillo de tortilla de patata, sobre todo si esta está bien jugosa. La ventaja de la tortilla es que además se puede tomar fría, aunque en algunos bares la calientan previamente en el microondas (casi mejor que no). En bastantes casos, a este bocadillo se le da más «categoría» añadiéndole alguna salsa. Le van bien la mayonesa, el alioli o la salsa brava picante como hacen en el bar Docamar, de Madrid, famoso precisamente por sus patatas bravas. No hay bar en España que no tenga este bocadillo. Prueben los de Juantxo, en San Sebastián.

  2. De calamares

    Bocadillo de calamares de El Brillante
    Bocadillo de calamares de El Brillante

    Otro de los bocadillos más tradicionales en España, especialmente en Madrid, donde los bares que rodean la Plaza Mayor se convirtieron en auténticos especialistas. A diferencia de otros ingredientes de bocadillos que no necesitan ninguna preparación, aquí sí hace falta cocina. En este caso es fundamental que el calamar sea de calidad, tenga un buen rebozado, lo más ligero posible, y esté bien frito, con aceite limpio. En Madrid tienen merecida fama los de El Brillante, al lado de la estación de Atocha. Recomendables también los de Mundo, en Valencia.

  3. De jamón

    Bocadillo de jamón de Joselito's
    Bocadillo de jamón de Joselito's

    Tampoco falta en ningún bar el bocadillo de jamón «serrano». Las calidades varían muchísimo en función del tipo de jamón que se utilice en su elaboración. Lógicamente lo más recomendable es utilizar un buen ibérico de bellota, cortado fino y en lascas para poder comerlo con más facilidad. A estos bocadillos es muy habitual añadirles tomate crudo, bien entero en rodajas, bien al estilo catalán, frotando el pan, previamente tostado, con el tomate, que suelta todo su jugo y buena parte de su pulpa, y con un poco de ajo. No se pierdan los que venden en la nueva tienda Joselito's, de Madrid, donde los hacen con el buen jamón de esta conocida marca de Guijuelo.

  4. De chorizo

    lobo

    Entre los más populares de todos los bocadillos que se comen en España están los de chorizo. Nada más sencillo que cortar unas rodajas de un buen embutido, cualquiera que sea su procedencia: de Villarcayo, de Cantimpalos, de León, de Guijuelo...y sobre todo el de Pamplona, el más habitual de todos desde hace muchos años para dar de merendar a los niños. Quién no tiene en la memoria un bocadillo de este chorizo de Pamplona con margarina untada en el pan. Por supuesto, mejor aún si el chorizo procede de la matanza de cerdos de raza ibérica. Está muy rico también cuando es picante o ahumado. Además de en crudo con el embutido curado, son muy habituales los bocadillos con chorizo frito, o cocido con vino o con sidra. En estos casos se sirve caliente, cortado trasversalmente. Pueden incluir aquí productos similares como la chistorra.

  5. De queso manchego

    EFE/MAURICIO DUEÑAS CASTAÑEDA

    Pocos productos hay que combinen tan perfectamente con el pan como el queso. Por eso se abren tantas posibilidades de bocadillos como tipos de este. Los hay de queso fresco acompañado de otros ingredientes como anchoas o salmón, de camembert, de queso azul, de cabra... Pero la estrella sigue siendo el queso manchego (y por desgracia sus sucedáneos), obviamente mejor el tierno o incluso el semicurado, más fáciles de comer. Solos o combinados con anchoas o con jamón.

  6. De ventresca y pimientos

    Ventresca y pimientos de piquillo
    Ventresca y pimientos de piquillo

    Una lata de buena ventresca de atún o de bonito en aceite. Un frasco de pimientos del piquillo procedentes de Navarra o de La Rioja. Abrirlos. Poner sus ingredientes dentro de una chapata o de una baguette abierta por la mitad. Y ya está preparado uno de los mejores bocadillos posibles, tan sabroso como jugoso. La combinación de los tres ingredientes, el pescado, la hortaliza y el pan proporciona un bocadillo único, cuya única pega, por poner alguna, es que chorrea un poco al comerlo. Eso sí, conviene que las dos conservas, tanto la ventresca como los pimientos, sean de la mayor calidad posible. Perfecto a cualquier hora y en cualquier época del año. Para más «sofisticación» se le pueden añadir unas anchoas en salazón.

  7. Pepito de ternera

    Los pepitos de «Pepito Ternera», en Zaragoza
    Los pepitos de «Pepito Ternera», en Zaragoza

    Otro de los grandes bocadillos es este pepito de ternera que es como se conoce popularmente al que lleva dentro del pan un filete de carne de ternera, que puede ser de cualquier corte pero queda mucho mejor si es de solomillo, frito con ajos laminados (y en ocasiones sin ellos). Un bocadillo caliente muy popular desde principios del siglo XX, sobre todo en Madrid, que es donde comenzó a prepararse, al parecer en el Café de Fornos. Curiosamente, en Zaragoza hay un bar que se llama así, «Pepito Ternera» y donde la gran especialidad es este bocadillo de carne. En Madrid lo encontrarán en cientos de bares. En los últimos tiempos han surgido muchas variantes añadiendo al filete todo tipo de ingredientes. Pero no son lo mismo.

  8. De anchoas

    Anchoas de Santoña
    Anchoas de Santoña

    Quien esto firma tendrá siempre en la memoria los bocadillos de anchoas que vendía Pedro en el bar del instituto Ramiro de Maeztu y que formaban parte imprescindible de la hora del recreo en la jornada escolar. Se trata de otro de los bocadillos más populares en España, donde tenemos unas anchoas magníficas en salazón. Con sus toques grasos y salados, combinan perfectamente con el pan. Y además hacer un bocadillo con ellas no puede ser más sencillo. Preferiblemente anchoas de buen calibre, con su punto justo de sal y bien tersas. No necesitan más acompañamiento, aunque van perfectamente con otros ingredientes como queso fresco, con tomate o con pimientos, que las suavizan, e incluso con bonito. Eso sí, siempre con una cerveza bien fría.

  9. De mortadela

    Tal vez el más modesto y más denostado de los bocadillos que comemos habitualmente en España. No tan modesto si se utiliza mortadela de calidad italiana, bastante más cara pero también más sabrosa y menos grasa. Este fiambre de cerdo, el más conocido de cuantos se elaboran en Italia, se produce principalmente en la región de Bolonia, pero tiene muchos sucedáneos en el mundo, bastantes de ellos de dudosa calidad. También aquí. Por suerte ya hay en las tiendas mortadelas genuinas de mucha calidad. Hagan un bocadillo con ellas y verán la diferencia. Volverán a comerlo con frecuencia.

  10. De sardinas en aceite

    Bocadillo de sardinas marinadas con cilantro, rajas de jalapeño rojo y semillas de tomate bola
    Bocadillo de sardinas marinadas con cilantro, rajas de jalapeño rojo y semillas de tomate bola - Javier lastras

    Las sardinas son sanas. Y baratas. Además en España tenemos excelentes conserveras que las enlatan en aceite. Con ellas, y con sus hermanas menores (en tamaño que no en delicadeza y sabor) las sardinillas se pueden hacer excelentes bocadillos que históricamente han estado muy ligados a las clases más populares pero que ahora disfrutamos todos. Bocadillos facilísimos de hacer en cualquier momento (basta con abrir la lata), y muy sabrosos. La gama de calidades es muy amplia, tanta como número de marcas en el mercado y variedad de precios. También van muy bien las que se hacen en escabeche, las picantes o las enlatadas con salsa de tomate. Solas o con algún acompañamiento como pimientos. Una comida completa en un trozo de pan.

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